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CóRDOBA
TRATA Y HOMICIDIO

Un testigo de identidad reservada fue quien aportó datos sobre Yamila Cuello

Mañana se cumplen 12 años de su desaparición. La Fiscalía sostiene la responsabilidad de Néstor Simone y Horacio Palacios, a partir de un testimonio corroborado con otras pruebas.

Yamila Cuello
ONCE AÑOS SIN YAMILA. El 25 de octubre de 2009 salió de la casa de su abuela y no se supo nada más de ella. La nueva hipótesis de la fiscalía es que su pareja, Néstor Simone, la asesinó. | Cedoc Perfil

A 12 años de la desaparición de Yamila Cuello, persiste el misterio sobre qué le sucedió. El 25 de octubre de 2009 salió de la casa de su abuela, en barrio Coronel Olmedo, y nunca se supo más nada de ella. Hoy, la principal sospecha es que fue asesinada, pero es una incógnita dónde se encontraría enterrado su cuerpo.

Desde que comenzó, la investigación incluyó diferentes hipótesis según transcurrió en despachos de la Justicia provincial y la federal. Se sospechó, inicialmente, de un homicidio intrafamiliar. Pero con el tiempo se apuntó a la posible existencia de un hecho de trata de personas.

En 2017, ante la inexistencia de pruebas que la acreditaran se la desechó y el expediente estuvo a punto de volver a los tribunales ordinarios. Sin embargo, la Cámara Federal de Córdoba ordenó que se siguiera escrutando sobre esa hipótesis, agotando todas las medidas posibles antes de descartarla. Eso hizo que el expediente permaneciera abierto en la Fiscalía Federal N°1, de Enrique Senestrari.

Hace un mes y medio fueron detenidos Néstor Simone –por entonces pareja de Yamila– y su hermano de crianza, Horacio Palacios, por orden del juez federal Ricardo Bustos Fierro. Fueron imputados por el homicidio de la joven en un contexto de trata de personas, aunque en ese momento no trascendieron precisiones sobre las pruebas que llevaron a incriminar a ambos y a Carina de la Silva, una amiga de la joven desaparecida. Se le atribuyó a ella haber encubierto a Simone y Palacios.

A los pocos días Bustos Fierro dictó su sobreseimiento, pero esa decisión está bajo revisión de la Cámara Federal porque el fiscal la apeló.

El hermetismo con el cual actuaron la fiscalía y el juzgado ante el nuevo escenario que llevó a prisión a Simone y Palacios, hizo imposible conocer los elementos que provocaron un golpe de timón en la pesquisa. Con el correr de los días y el despliegue de las acciones defensivas, comenzaron a conocerse algunos detalles.

Testigo de identidad reservada. PERFIL CÓRDOBA confirmó que fue el testimonio de una persona de identidad reservada la pista sobre la que se construyó la nueva sospecha. El testigo fue detectado por los comisionados de la investigación meses atrás y habría señalado que Simone mató a Yamila y contó con la colaboración –al menos– de Palacios para esconder su cuerpo.

Esto lo habría comunicado en los círculos sociales donde se movió. Carina Da Silva resultó imputada por encubrimiento, según la fiscalía, porque había dicho no conocer a Simone, cuando de las comunicaciones telefónicas se advirtió su cercanía en el momento en que se habría consumado el crimen. Además del testimonio de identidad reservada hay una entrevista a una mujer quien también habría aportado datos en el mismo sentido, pero que no fue convocada aún a declarar.

“Es un inicio”, indicaron fuentes de la fiscalía reconociendo la dificultad que presenta el paso del tiempo para reconstruir cómo podrían haberse producido los sucesos. En esos despachos existe una prudente expectativa para que Palacios cuente todo lo que sabe. Si no colaboró con el crimen podría revelar lo que conoce. Por lo que pudo averiguar este medio, es muy poco probable que ello ocurra.

Simone ya fue sobreseído por el delito de trata. En este nuevo requerimiento, el fiscal lo incriminó por un homicidio en un contexto de trata por el sometimiento de Yamila a sus acciones. Se sabe que era jugador y no son pocos los testimonios que hablan de que en sus apuestas incluía a la joven.

Jorge Perano
JORGE PERANO, defensor de Palacios.

"PALACIOS ESTÁ DISPUESTO A CAREARSE CON ESE TESTIGO"

Jorge Perano, defensor oficial de Horacio Palacios, dijo que su asistido está dispuesto a carearse con el testigo de identidad reservada. Señaló que “niega rotundamente” conocer algo de lo que le pasó a Yamila Cuello y que “está apenado” por su desaparición con la que nada tiene que ver.

El pedido de careo debe ser resuelto por el juez Bustos Fierro. Perano también cuestionó que la acusación se cimiente en la entrevista de los comisionados a una mujer, ya que “dice cosas inexactas” y al no declarar como testigo no estuvo obligada a decir la verdad.

El viernes último presentó al juzgado el pedido de sobreseimiento de Palacios invocando la falta de mérito, para que se ordene de inmediato su excarcelación. Y planteó que el delito de trata está prescripto.

Desde la fiscalía sostienen, en relación a ese punto, que la Protex (Procuraduría de Trata y Explotación Sexual) aportó abundante argumentación con jurisprudencia y doctrina que fundamentan mantener abierta una investigación mientras el cuerpo de la víctima continúa desaparecido.