Una investigación desarrollada conjuntamente entre la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA), organización que representa a más de 250 entidades del ámbito MiPyme y el Laboratorio de Cognición y Políticas Públicas (UBA-UAI-CONICET) reveló que los empresarios MiPyme y trabajadores son los más afectados por la pandemia.
De acuerdo con el estudio, el 40,2% de los dueños de MiPymes incluidos emprendedores, pensaron, en algún momento de la cuarentena, en cerrar sus negocios. Asimismo, presentan niveles más altos de depresión y mayores reacciones al estrés producido por la pandemia. La vinculación con el estrés en este sector productivo guardaría relación con el cierre de sus persianas, agravado por la relación de cercanía en el vínculo con sus trabajadores. Vale recordar que, en Argentina, las MiPymes genera el 70% del empleo pero que su poder de delegación es muy bajo siendo el dueño un trabajador más en la cadena productiva.
Por otro lado, la encuesta muestra que quienes realizaron home office presentan un mayor nivel de estrés por pandemia que quienes trabajan fuera del hogar. A su vez, son quienes más estrategias de afrontamiento al estrés utilizan (uso de métodos de prevención). En base a investigaciones complementarias, quienes estuvieron más tiempo en su domicilio tuvieron mayor exposición a información sobre el tema, lo cual aumenta directamente los niveles de somatizaciones, estrés y ansiedad.
El estrés es peligroso, ¿cómo desestresarnos?
En ese sentido, también se debe señalar que son muchas las cuestiones que afectan a la nueva modalidad laboral que obstaculizan la posibilidad de realizar una interpretación final o acabada. Incluso, pese a muchas de estas circunstancias, la mayoría de los encuestados desean conservar esta modalidad aunque sea una o dos veces por semana.
"Muchas veces nos muestran a los empresarios MiPymes de un lado de la brecha y a los trabajadores en el otro, este relevamiento viene a mostrar que somos todos los mismos que empujamos al país, somos todos trabajadores de esta cadena productiva, y, situaciones como esta pandemia que estamos viviendo nos dañan de la misma manera y con ello a todos. Celebro poder haber hecho esto con instituciones que aportan al CONICET ya que evita la mirada sesgada dando lugar a una integradora de toda la comunidad" Camilo Alberto Kahale Presidente de la Federación Económica de Buenos Aires (FEBA)
"Este trabajo refleja la importancia de articular al CONICET con las PYMES en particular, y a todos los sectores de la sociedad en general, que encuentran en la ciencia el conocimiento necesario para mejorar su competitividad y la correcta toma de decisiones en un contexto de incertidumbre como el que vivimos actualmente. Los datos que obtuvimos con FEBA son importantes para pensar e intervenir en la salud de los trabajadores y MiPymes. En este sentido, se busca incentivar políticas que faciliten el apoyo y la contención de las personas atendiendo factores de vulnerabilidad y consecuencias psicológicas que trae el contexto actual" Dr. Angel Elgier, Investigador Adjunto del CONICET y director del Laboratorio de Cognición y Políticas Públicas (UBA-UAI-CONICET)
La encuesta también arrojó que a menor edad, existe mayor nivel de depresión (pesimismo, irritabilidad, angustia, incertidumbre, ansiedad, problemas de sueño, entre otros), reacciones al estrés por pandemia (miedo al contagio propio o de la familia, que el sistema de salud, colapse y que no haya recursos para afrontar) y menor uso de estrategias de afrontamiento (seguir las recomendaciones de autoridades de salud, normas de higiene y distanciamiento social).
Además, se observan diferencias estadísticamente significativas según el género, siendo las mujeres quienes puntúan más en depresión, en estrés por pandemia pero también en el uso de estrategias de afrontamiento (lavarse continuamente las manos, seguir las recomendaciones sanitarias, etc).
En juego con un relevamiento realizado desde mujeres CAME, el 81% de las mujeres vio afectada su rutina de tareas y el 70% tuvo que restar horas a su empresa.
Teniendo en cuenta la pro actividad característica del género, otro número interesante es que sólo el 38% incorporó nuevas tecnologías a sus negocios, un 29% cambió sus horarios de atención al público y hasta un 4% de las empresarias cambiaron de rubro. En concordancia con esto, un informe de CAME JOVEN, y en torno por ejemplo al teletrabajo, el 63% de las pymes de jóvenes empresarios no lo está implementando. De este grupo, el 66% refiere a que el tipo de actividad no se lo permite.
Del total de la encuesta surge que el 54,7% de los encuestados (empresarios y trabajadores), vieron reducidos sus ingresos económicos. El 44,2% presentan un nivel de depresión de moderado a severo y el 80,5% un nivel fuerte a muy fuerte de estrés por pandemia.
Entre el miedo y la esperanza
Otro dato importante, es que la mayoría de los encuestados del grupo “desempleados” considera que la búsqueda de trabajo es más complicada en el contexto actual.
Estos resultados ponen de manifiesto la importancia de abordar la situación de pandemia y sus consecuencias desde una perspectiva psicológica, entendiendo a la salud no sólo como el bienestar físico, sino también psicológico y social.
La muestra estuvo formada por 520 personas (387 de género femenino) con una edad media de 36.6 años, residentes en la Provincia de Buenos Aires y AMBA. Los datos fueron recolectados del 11 de agosto de 2020 al 02 de septiembre de 2020.