ECONOMIA
TRAS LA DEVALUACION

Estos son los ganadores del dólar a $20

Mientras no haya traslado a precios, se abre una ventana de alta rentabilidad para los exportadores del campo, las economías regionales y la industria. Llegan más turistas.

Rocca, Techint
Industria. El holding de siderurgia Techint, con Paolo Rocca, a la cabeza, gana competitividad salarial de la mano de la devaluación. Mejoran los costos laborales respecto de la región | Cedoc

Con el dólar en un máximo de $ 20,50 en la semana —aunque bajó unos centavos en su último cierre gracias a la intervención del Banco Nación— hay sectores productivos que respiran algo más relajados como los grandes exportadores, agro e industria, mientras que también se encarecen las importaciones.

Esta podría ser una buena noticia para los sectores Pyme que, sin embargo, remarcan que la devaluación trae aparejada el traslado a precios en los insumos importados y la suba de un costo ahora librado a los vaivenes del peso frente a la divisa norteamericana: la energía.

El combo se completa con una baja en dólares del costo argentino, en particular, del salarial, en medio de paritarias que el Gobierno busca negociar al 15% y sin cláusula gatillo, lo que podría mejorar la ecuación para la “lluvia de inversiones” del segundo semestre, versión 2018.

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Pero según los economistas, la ventana de oportunidad es estrecha: la tendencia es a la apreciación por el ingreso de divisas y la inflación del primer trimestre. “A fines de marzo o principios de abril empiezan a entrar los dólares de las exportaciones y eso le va a poner un techo”, advirtió el economista Víctor Beker, de la Universidad de Belgrano. El tipo de cambio sigue un 20% atrasado contra diciembre de 2015 y la variación “no mueve demasiado el amperímetro”, según Beker.

Varias multis argentinas toman nota rápidamente de una mejora en los costos. Tal es el caso de holdings que compiten en el exterior y cada vez que salta el tipo de cambio bajan el costo laboral hora/hombre, como ocurre con el holding siderúrgico Techint, de la familia Rocca, que se compara contra la producción en México o Brasil, o con compañías como San Miguel, líder en la exportación de limones que, controlada por los Bemberg y los Otero Monsegur, también sigue de cerca la competitividad respecto a otros mercados.

En el Gobierno sostienen que el dólar se está recuperando del atraso. “El dólar estuvo deprimido. Todos se quejan de que está atrasado y apenas sube unos centavos se asombran. Es normal que se ajuste de acuerdo al mercado”, es la evaluación que se replica en los despachos oficiales.

“Que suba el precio del dólar regula el ingreso de mercadería importada”, reconoció Horacio Moschetto, representante de la Cámara del Calzado. Del otro lado, ponderó que “podría llegar a generar algo de inflación en los insumos importados”, aunque en su sector, la mayoría son nacionales.

Otro de los sectores donde el nuevo dólar podría tener impacto es el del turismo. Según el ministro Gustavo Santos, con este nivel ya es competitivo. “El crecimiento de la llegada de turistas por vía aérea ha sido casi del 8%, con picos muy importantes en los últimos meses de 2017”, dijo al diario ABC de España sobre el resultado 2017, con el dólar atrasado, lo que entusiasma para empezar a revertir el déficit de más de US$ 10 mil millones estimado para este año en la balanza de viajes.

En el campo también consideran que es un buen valor para empezar a vender la soja en silobolsas. “En la medida en que los granos empiecen a reflejar la devaluación, el productor va a ir vendiendo. No creo que el Gobierno permita que se dispare más allá de esto”, ponderó Horacio Busanello, consultor y ex CEO de Los Grobo. El mayor exportador argentino de aceite de soja, Aceitera General Deheza, de la familia Urquía, es un caso testigo de la mejora en competitividad con el dólar a $ 20.

Precios. “Necesitamos una actualización del tipo de cambio que no se traslade a los precios. Si la suba se traslada a los costos de los insumos, estamos en la misma. La energía también aumenta en dólares. Los químicos, materias primas, se rigen por el tipo de cambio”, detalló Daniel Rosato, titular de Industriales Pymes Argentinos (IPA).

En el oficialismo consideran que si el dólar está entre $ 20 y 21 “no tiene efecto en precios.

En los despachos oficiales reiteran que el dólar a $ 20 acompañó la inflación y consideran que el valor actual “no viene nada mal y genera rentabilidad para exportar. Pero reconocen que “el tema es en unos meses”.