El presidente del Banco Central Federico Sturzenegger apareció este miércoles públicamente por primera vez desde se inició la fuerte escalada del dólar y tras haber logrado renovar ayer el 100% del megavencimiento de Lebacs por $615 mil millones, y en una autocrítica admitió que “el mercado habló en las últimas semanas, fue un mensaje para el Central y para el Ejecutivo que nos hizo reflexionar y cambiar algunas cosas”. El funcionario reconoció, asimismo, que “el mercado no creía en la política monetaria” y por eso la entidad debió subir las tasas de referencia tres veces para elevarla de 27,25% a 40%.
El funcionario reapareció para brindar la conferencia de prensa que ya estaba pautada en el calendario del BCRA para presentar el Informe de Estabilidad Financiera, pero en el auditorio además de periodistas estaban presentes también entre otros, economistas como Ricardo López Murphy, y Miguel Bein, y el presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), Claudio Cesario.
Sturzenegger consideró que en las últimas semanas “corrida (cambiaria) no hubo” sino que “hemos tenido una turbulencia, no volatilidad en el mercado cambiario” por una combinación de “factores internos y externos”. En ese marco, defendió la estrategia desplegada durante ese lapso por la entidad y ratificó el tipo de cambio flotante.
Al respecto, explicó que “esta semana el tipo de cambio ya estaba fuera del rango de nuestro modelo y había que dar una señal clara” al justificar que el BCRA saliera a ofrecer en la plaza cambiaria 5.000 millones a un dólar a $25. Al ser consultado sobre si ese era el valor de equilibrio del dólar, el funcionario planteó: “Este número para este trimestre, el número de 25, está totalmente fuera de escala, entonces fue un valor que a nosotros en este momento queríamos decirle al mercado no, dada las condiciones monetarias; estaba tan desconectado que nos pareció que podíamos poner en este momento un corte en ese nivel”.
Sturzenegger también aseguró que “pasadas estas turbulencias” el “foco central del BCRA es encauzar la inflación, vuelve a ser el objetivo primario”. En ese sentido, prometió que se “consolidará el proceso de desinflación” y estimó que la inflación de “mayo va a venir por abajo de abril (fue de 2,7%) porque ayudará que no hay suba de precios regulados”. De todos modos, reconoció que “hay que trabajar en la inflación núcleo porque se ha mantenido en un nivel alto” que “no es el que queremos”. Consultado sobre si habrá un reajuste de la meta inflacionaria anual, se limitó a decir que “la pauta es la que es” e insistió en que “la inflación va para abajo, estamos convencidos, pueden estar tranquilos”.
Por otra parte, al ser consultado sobre el inicio de gestiones con el FMI para acceder a un crédito stand by de alto acceso, sostuvo que “no fue una decisión del Banco Central, pero estamos comprometidos con una negociación que va a ser muy beneficiosa para Argentina”.
