Según la descripción que hace la Doctora en Medicina y Cirugía Mónica Liliana Ñañez, Profesora II Cátedra de Ginecología UNC, especialista en Climaterio y Experta Latinoamericana en Climaterio, el síndrome génito urinario “se trata de un conjunto de signos y síntomas asociados a la disminución de las hormonas femeninas, los estrógenos, en la postmenopausia, que involucran cambios en los labios mayores y menores, el clítoris, la vagina, la uretra y la vejiga”.
¿Son síntomas del climaterio como lo son los sofocos?
Aunque es probable que los sofocos, el síntoma universal de la menopausia, disminuyan con el tiempo, los síntomas de la Atrofia Urogenital (AUG) son progresivos y no tienden a resolverse sin tratamiento.
¿Todas las mujeres en la postmenopausia se verán afectadas?
En mayor o menor medida, sí. Sin embargo, el 50% o más, tendrán síntomas moderados a severos, que pueden interferir con sus actividades cotidianas, eventos sociales y repercutir también en la esfera psicosexual. De hecho, 1 de cada 3 mujeres en la postmenopausia, no tienen relaciones sexuales, a causa de la atrofia urogenital.
¿Cuáles son los síntomas de los trastornos genitales y urinarios?
Sequedad vaginal; dolor y sangrado con las relaciones sexuales; disminución de la libido; prurito y ardor vulvo vaginal; mayor predisposición a infecciones vaginales por cambios en el PH; urgencia miccional; nicturia, que es levantarse a la noche a orinar; polaquiuria, que es orinar varias veces por día; disuria o molestias al orinar; infecciones urinarias a repetición; incontinencia de orina al toser, estornudar, reír, hacer ejercicio físico, caminar o levantar algo pesado.
¿Es posible prevenir esta afección?
Sí, absolutamente. A todas las mujeres se les debe solicitar información completa sobre los síntomas vulvovaginales y urinarios en cada visita a su ginecólogo. A pesar de la elevada prevalencia de la atrofia genitourinaria en las mujeres, en la postmenopausia, solo una cuarta parte de ellas consultan en busca de atención médica. El tratamiento hormonal con cremas y óvulos es obligatorio, independientemente si existen o no relaciones sexuales, ya que, con el tiempo, los síntomas serán más severos. El tratamiento debe ser continuo para mantener los beneficios.
¿Cuáles son los tratamientos disponibles?
Son ambulatorios, eficaces, seguros y sin dolor. El láser actúa por efecto térmico, favoreciendo la producción de colágeno nuevo. Aumenta la vascularización sanguínea y la permeabilidad de las mucosas, provocando una regeneración vulvovaginal, tratando todos los síntomas de la atrofia urogenital.
Por su parte, el HIFU o Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad, emite una onda que hace que aumente de temperatura el tejido donde se aplica, provocando que la fibra de colágeno se estire y reordene para lograr el rejuvenecimiento.
Es ideal para el tratamiento de la atrofia urogenital, incontinencia de orina, falta de lubricación, laxitud vaginal, dolor durante las relaciones sexuales y prolapsos no quirúrgicos. La aplicación dura entre 30 y 40 minutos y, según el caso, se pueden realizar hasta tres sesiones. La expectativa de vida se ha incrementado, por lo tanto, debemos brindar a nuestras pacientes, una buena calidad de vida.
Para contacto: Velez Sarsfield 562, Ciudad de Córdoba // Tel.: 0351-4267797 // [email protected].
Conoce más en sus perfiles de Instagram y Facebook.