La cirugía mínimamente invasiva en el manejo de las neoplasias ginecológicas se ha incrementado considerablemente en la última década. “La posibilidad de realizar los procedimientos quirúrgicos necesarios por cirugía laparoscópica para tratar el cáncer ginecológico, ha mejorado el cuidado y la calidad de vida de las pacientes”, aclara el Dr. Gustavo Rebagliati, Ginecólogo especializado en Cirugía Ginecológica (MN 93687 MP 446398)
- ¿Cuáles son las ventajas de la cirugía laparoscópica con respecto a las técnicas estándar?
Son muchas: menor sangrado operatorio, menor dolor posquirúrgico y pronto restablecimiento de la vía oral, menor tiempo de hospitalización posquirúrgica, mejor efecto cosmético y calidad de vida, pronta reincorporación a la vida cotidiana y uso temprano de terapia adyuvante. Hoy en día hay muchos estudios publicados y comparativos entre la cirugía laparoscópica y las cirugías convencionales que avalan los excelentes resultados, como así también el menor número de complicaciones, observado con el avance en la curva de entrenamiento de los cirujanos. Por otra parte, y más allá de los beneficios que pueda otorgar, es importante destacar que la sobrevida lograda con ella es igual o mejor que la alcanzada con la técnica estándar. Ya hay numerosos estudios que demostraron que el riesgo de recurrencia no parece incrementarse, y por lo tanto la sobrevida global es la misma. Las ventajas de la Laparoscopia son muchas. Ofrece una imagen amplificada que permite una gran precisión, mejorando la identificación de todas las estructuras anatómicas y reduciendo las pérdidas hemáticas y la morbilidad post-operatoria.
En pacientes de alto riesgo quirúrgico, disminuye el riesgo de complicaciones como trombosis, embolias, íleo o paralización del intestino y todas las de la herida quirúrgica (eventraciones, infecciones, seromas, etc). Las pacientes obesas se benefician especialmente del abordaje laparoscópico comparado con la vía tradicional. Y reduce el tiempo de inicio de los tratamientos oncológicos complementarios en caso de ser necesarios (radioterapia y quimioterapia) debido al menor trauma quirúrgico y la menor tasa de complicaciones de la cirugía.
- ¿Para qué tipo de neoplasias está recomendada la laparoscopía?
Refiriéndonos, puntualmente, al cáncer genital femenino esta vía de abordaje es útil en el cáncer de endometrio (la capa interna del útero), el cáncer del cuello uterino y el cáncer de ovario.
- ¿La cirugía es el único abordaje posible?
Si bien la cirugía es una parte fundamental del manejo multidisciplinario de las pacientes con cáncer, no es el único tratamiento. Su papel incide en varios momentos durante el tratamiento de una paciente oncológica como: prevención, diagnóstico, evaluación de la extensión (estadificación) de la enfermedad, tratamiento curativo, manejo de las secuelas y complicaciones producidas por los tratamientos y no menos importante en la paliación.
- ¿En qué consiste la técnica de ganglio centinela?
Actualmente, a todo el beneficio de una cirugía con menos morbilidad se le suma la técnica de ganglio centinela, con su alto redito diagnóstico. Esto se realiza mediante la inyección de colorantes o por marcadores lograr la identificación de primer ganglio de toda la cadena y así evitar extirpar todos los ganglios tal como se hace hoy en el cáncer de mama. En esto tiene fundamental utilidad la laparoscopia para cáncer de cuello y endometrio, y se encuentra cerca de ser un estándar, ya que permite identificar pacientes de bajo riesgo con enfermedad ganglionar no sospechada. Y en el caso del cáncer de endometrio de alto riesgo, evitar linfadenectomías sistemáticas.
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