En el marco de las elecciones presidenciales en Irán, el clérigo ultraconservador Ebrahim Raisi ganó este viernes con más del 61% de los votos emitidos, según los resultados publicados por el Ministerio del Interior, en comicios marcados por una baja participación ciudadana en comparación a rondas anteriores. La abstención, aunque no fue confirmada por las autoridades, habría orillado el 50 por ciento.
El presidente saliente, Hasán Rohani, y el presidente del Parlamento iraní, Mohamad-Baqer Qalibaf, visitaron la sede de campaña de Raisi para felicitarlo por su victoria.
El líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, también celebró esta "gran victoria", saludando al vencedor y a los ciudadanos que habían concurrido a votar: "La ganadora de las elecciones de ayer es la nación iraní. Se ha alzado ante la propaganda de los medios mercenarios del enemigo que apela al débil de mente".
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Jameni agregó: "Ni las dificultades económicas, ni la angustia de la amenaza de la COVID-19, ni los intentos de la oposición de desanimar a la gente lanzados hace meses ni las interrupciones de las primeras horas de las elecciones han superado la determinación de la nación iraní".
Con más de 17,9 millones de votos de los 28,9 millones emitidos, Raisi le ganó a su rival Mohsen Rezaei, quien consiguió 3,4 millones de votos, y detrás de él quedaron Abdolnaser Hemati y Amirhosein Qazizadé Hashemi con 2,4 millones y 1 millón respectivamente.
Sin embargo, indicaron una participación ciudadana inferior a rondas anteriores, dado que estaban convocados a las urnas más de 59 millones de iraníes.
En tanto, Raisi, el octavo presidente de la nación iraní desde que la Revolución Islámica de 1979 derrocara a la monarquía, señaló que consultará con la administración saliente, el Parlamento y las élites "para resolver los problemas del país".
Tras pasar la mayor parte de su carrera en el aparato judicial, Raisi llegó a convertirse en custodio de la fundación religiosa Astan Quds Razavi, la más grande en el mundo islámico, por lo cual logró conseguir un gran poder e incluso figura como principal favorito para suceder al gran ayatolá Jamenei al frente del país.
CFT