El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue imputado en el marco de la investigación en su contra por el presunto pago de un soborno a la actriz de cine porno Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels. Es la primera vez en la historia del país que un expresidente o un mandatario en funciones se tiene que sentar en el banquillo de la justicia.
Sobre esta acusación histórica, el republicano de 76 años niega haber actuado mal en relación con los pagos realizados antes de las elecciones de 2016 que lo enviaron a la Casa Blanca, y asegura que la causa es "una persecución política" y una "caza de brujas" en su contra.
La Fiscalía de Manhattan le había ofrecido a Trump la posibilidad de declarar en este caso de presunto soborno, en el que está imputado por entregar a Clifford unos 130.000 dólares para no revelar que mantuvieron relaciones hace casi 20 años.
La gestión fue realizada de manera irregular al quedar escondida en las cuentas de la Trump Organization, la compañía del magnate, durante la campaña electoral de 2016. "Nadie está por encima de la ley", dijo Clark Brewster, abogado de la actriz porno Stormy Daniels, quien aseguró haber mantenido una relación extramatrimonial con el empresario, vínculo que él siempre negó.
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"Persecución política": la palabra de Donald Trump sobre la imputación
Donald Trump criticó la acusación como "persecución política e interferencia electoral" y prometió que sería contraproducente para su sucesor Joe Biden, mientras que el hijo del expresidente, Eric, atacó el "ataque oportunista de un oponente político".
Además, el ex mandatario tildó al fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg –de quien depende su imputación– de "desgracia", y de hacer "el trabajo sucio" del actual presidente, cuya victoria en las elecciones de 2020 nunca reconoció.
"Esta es una persecución política y una interferencia al mayor nivel de la historia en una elección", aseguró en un comunicado el 45º presidente de Estados Unidos, que acusa a los "demócratas radicales de izquierda" de una "caza de brujas para destruir el movimiento Make America Great Again" (MAGA), que él representa.
Su equipo legal llevaba semanas anticipando que Trump sería imputado y ya estaba preparando su estrategia, según fuentes de la CNN.
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El entonces abogado de Trump –y ahora su enemigo– Michael Cohen, declaró ante el gran jurado de Manhattan y aseguró que él fue el encargado de hacer el pago a Stormy Daniels en nombre de su entonces jefe y que después se lo reembolsó.
Si el pago no hubiese sido debidamente acreditado, esto podría resultar en un delito menor por falsificación contable, aunque también se investiga que podría haber violado la ley de financiamiento de la campaña electoral, que puede significar cuatro años de cárcel.
Trump comparecerá en Manhattan una vez formuladas las acusaciones y tiene previsto dar un discurso después de la audiencia preliminar para que un juez le notifique la acusación. Allí se espera que quede brevemente "bajo arresto" para ser fotografiado y tomarle las huellas dactilares. A continuación, tendría que declararse culpable o inocente de los cargos por los que ha sido investigado.
ds ag
