El presidente de la República de Uruguay, José Mujica, fue sorprendido cuando estaba dando una serie de notas televisivas por un indigente conocido como “El César” quien le pidió llorando “una moneda para comer algo”.
El mandatario observó al hombre y le confirmo que lo ayudaría únicamente si dejaba de llorar, y le ordenó a una persona de su entorno que lo ayude. Sin embargo, el indigente insistió y le pidió nuevamente: “Una moneda suya, Pepe”.
“Mirá hermano, moneda no tengo pero ¡no llorés, carajo!", dijo Mujica mientras sacaba de su billetera $100 pesos uruguayos, equivalente a poco más de cuatro dólares. "Andá, ¡vamo' arriba!", dijo el mandatario.
"Quiero que seas presidente toda la vida", agradecio el indigente, aunque Mujica rechazó la idea: "No, no, sos loco". Ante la negativa, el hombre aseguró que entonces quería a Tabaré Vázquez como el nuevo presidente.