Agencias. Montevideo
El presidente uruguayo, José Mujica, aseguró ayer que, mientras viva, “nunca” venderá su viejo Volkswagen Fusca de 1987, codiciado por un jeque árabe que le ofreció un millón de dólares por el automóvil, convertido en símbolo de la austeridad del mandatario. “Desde siempre somos amigos de los Fuscas”, dijo Mujica en su programa radial Habla el presidente, en la que también recordó el primer Escarabajo que conoció cuando era “un muchachito”.
“Con el paso de los años, cuando intentábamos cambiar la suerte del mundo en que vivimos, nos hicimos enamorados de los Fuscas, hasta el día de hoy”, contó el ex tupamaro, que concluirá su mandato presidencial en marzo de 2015. “En realidad tenemos (su esposa Lucía Topolansky y él) dos: uno un poco desvencijado que está en el galpón y no anda, y éste que estamos usando desde que somos presidentes y que un puñado de amigos nos regaló luego de hacer una colecta –reveló–. Nunca lo podremos vender porque ofenderíamos a esa gente que nos hizo el obsequio”.
El presidente vaticinó así que “esos dos Fuscas van a vegetar en los viejos galpones mientras estemos vivos, y el provenir dirá cuál es su destino”. La semana pasada, el semanario Búsqueda había informado que un jeque árabe le propuso a Mujica, durante la cumbre del G77, celebrada a mediados de año en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), un millón de dólares por el auto.
“Hay amigos uruguayos que están por las redes clamando que el Fusca no se vaya del país –insistió Mujica–. No sé si algún día se va o no se va, pero mientras yo viva va a dormir en el galpón y de vez en cuando dará una vueltita por el barrio”.
El Pepe, que llega al final de su gestión con una popularidad superior al 50%, sigue viviendo en su modesta chacra del barrio Rincón del Cerro, en las afueras de Montevideo, y dona la mayor parte de su salario al Plan Juntos, un proyecto de vivienda solidaria que creó cuando llegó a la presidencia.
A Mujica le queda poco tiempo en el poder: el próximo 26 de noviembre se disputará en Uruguay la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en las que se elegirá a su sucesor. Tras haber ganado en el primer turno, el candidato oficialista Tabaré Vázquez llega con una considerable ventaja en las encuestas frente a su rival, el líder del opositor Partido Nacional, Luis Lacalle Pou.