Los restos del barco Endurance, propiedad del explorador angloirlandés Ernest Shackleton, fueron encontrados en la Antártida este miércoles, luego de su último naufragio en el año 1915.
La embarcación fue hallada en el mar de Weddell, a una profundidad de 3008 metros y a unos seis kilómetros del lugar en el que se hundió. El arqueólogo responsable de la exploración, Mensun Bond, sostuvo en diálogo con la agencia AFP, que estaban "abrumado por haber logrado localizar y captar imágenes del Endurance".
"Es el barco hundido más bello que he visto: se mantiene erguido, orgulloso en el fondo del mar, intacto, en un estado de preservación fantástico. Se puede leer incluso el nombre Endurance en la popa", agregó Bond.
El grupo de exploradores que trabajó en la búsqueda de la embarcación utilizó tecnología de última generación para adentrarse en la zona de la Antártida. Esta expedición, que partió de Sudáfrica el 5 de febrero pasado, fue llevada adelante por el Falklands Maritime Heritage Trust, y precisó de unas 100 personas trabajando.
En busca del barco de Shackleton, hundido entre los hielos antárticos hace 107 años
"Esta es la mejor búsqueda de un naufragio que puedes emprender. Lo normal es que mi vida ya no sea tan emocionante después de eso", finalizó Bond al respecto del trabajo realizado.
La historia detrás del barco Endurance
La expedición se remonta al año 1915, cuando el explorador Shackleton quiso cruzar la Antártida en un viaje de 2900 kilómetros desde el mar de Weddell al mar de Roos, pasando por el Polo Sur. Sin embargo, algo no salió como lo esperado: el barco quedó atrapado entre la banquisa de hielo en el mar de Weddell por meses hasta que el hielo logró perforar parte de su base y lo terminó por hundir definitivamente.
La tripulación que acompañaba a Shackleton sobrevivió y se refugió en la isla del Elefante. Luego fue el líder de la travesía quien, acompañado por algunas personas que estaban en condiciones, se aventuró a la búsqueda de ayuda en un bote pequeño que lo llevó hasta las islas Georgias del Sur, en el Atlántico Sur. Allí pudo conseguir la asistencia que necesitaba para sus compañeros y le salvó la vida a todos.