Parece parte de una película de ciencia ficción, pero es la vida real. En Rusia, un joven ingeniero se implantó un chip en la mano para poder "pagar más rápido en el tren y para entrar a la oficina sin tener que sacar la tarjeta de su cartera".
Vlad Zaitsev había decidido implantarse en su mano los chips NFC tanto de su tarjeta de viaje –similar a la SUBE– y la que le permite el ingreso a su oficina, según indica el portal Independent.
Para extraer los chips, Zaitsev disolvió las tarjetas en acetona y cubrió las piezas metálicas resultantes en silicio, lo que es seguro para insertar en la palma de la mano.
Como no podía ser de otra manera, el momento del procedimiento quirúrgico fue grabado y se ve como se inserta el chip y la gran cicatriz que quedó al finalizarse el mismo.
"Es la solución perfecta si se teme perder el ticket de tren, aunque tengo que admitir que seguramente seré el tema de conversación de la gente durante un tiempo", afirmó.