El 26 de abril de 1986 explotó el reactor de la central de nuclear de Chernobyl, uno de los peores desastres nucleares de la historia que provocó la muerte de más de 200 mil personas. Un documental sacó a la luz imágenes inéditas de las terribles consecuencias que dejó el accidente que van desde manchas verdes brillantes, hasta extraños casos de cáncer de piel.
A 36 años de la detonación del cuarto reactor de una de las sedes nucleares más grande de la Unión Soviética, actual territorio ucraniano en disputa, el documental Chernobyl: The Lost Tapes, de New Sky, estrenado el pasado miércoles 22 de junio en HBO, mostró el impacto que tuvo el desastre en los niños por nacer.
Guernica y Chernobil, dos estallidos que hicieron temblar Europa en el siglo XX
Luego de la explosión, más de 100 mil personas fueron evacuadas y se estableció un perímetro de exclusión de 20 millas que aún sigue vigente. Pese a que solo dos personas murieron en el accidente, se calcula que más de 200 mil perdieron la vida tiempo después debido a la alta radiación que permanece en la zona.
Las secuelas del accidente se hicieron notar en la salud de la población local, ya que los niños que nacieron luego de la catástrofe llegaron a desarrollar cáncer de piel extremadamente extraño y presentar manchas verdes brillantes en la piel; hasta incluso, “colas de pez”, según indicó Dayli Mail.
La central nuclear de Chernobyl, y su sarcófago 30.000 toneladas, botín de guerra ruso
Más allá de los niños, el documental evidencia cómo los hombres que fueron contratados luego para terminar con el fuego en la central nuclear presentaban raras cicatrices en su cuerpo, como también las consecuencias duraderas que aún se hace notar en las familias de los socorristas.
A pesar toda la información que salió a la luz, Rusia mantiene la cifra de muertes por el accidente en 31, entre operadores y personas que trabajaron en el lugar, ya que, en su momento, la Unión Soviética rechazó cualquier tipo de impacto en la salud de la población.
La amenaza de una nueva catástrofe nuclear
El país de Chernobyl que confía aún en lo nuclear
Con la disolución de la Unión Soviética, Ucrania se formó como país independiente. Sin embargo, el 24 de febrero de 2022, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, inició la invasión al territorio ucraniano y desató una nueva guerra en Europa.
Uno de los principales lugares que tomó el Kremlin fue la base de Chernobyl, lanzando un misil contra un sector de la base, lo que puso en peligro el sarcófago que protege al reactor. Sin embargo, afortunadamente, los niveles de radiación pudieron controlarse y tras la retirada rusa se pudo retomar el monitoreo correspondiente.
Zaporizhzhia, la central más grande de Europa, fue también bombardeada por las tropas rusas, pero el ataque no comprometió a los reactores nucleares. De igual forma, el temor por una nueva amenaza nuclear se extendió por todo el mundo.
RdC / ds