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Botox en tiempos de coronavirus: aplican inyecciones al mejor estilo "autocine"

Michael Salzhauer, cirujano plástico, realiza el procedimiento desde el garaje de su edificio, donde los pacientes hacen fila en sus autos. Galería de fotos

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En Miami, un cirujano plástico aplica botox a sus pacientes mediante la modalidad "autocine" | Reuters

Desde el 4 de mayo pasado, Estados Unidos flexibilizó varias de las actividades supendidas por el confinamiento impuesto por la pandemia de coronavirus. En ese marco, varias procedimientos médicos se reanudaron, entre ellos, las inyecciones de Botox, mediante un protocolo muy particular.

En el barrio de Bal Harbour, Miami, el cirujano plástico Michael Salzhauer, conocido como 'Dr. Miami ', aplica inyecciones de botox en el garaje de su edificio: los pacientes van al lugar en sus vehículos, y el procedimiento se realiza mediante la ventanilla del auto y con el uso de elementos de protección, como tapabocas y máscaras.

"Las áreas en las que inyectamos Botox son de la cara superior, las partes de la cara que no están cubiertas por la máscara, por lo que es realmente ideal", dijo Salzhauer, reconocido además por protagonizar un reality show televisivo.

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Para atender a sus pacientes, usa una máscara, un protector facial y una bata quirúrgica. Quienes quieren realizar el procedimiento, deben inscribirse de manera online, y el costo promedio de de inyecciones de bótox en la frente es de 600 dólares, según consignó Reuters. Salzhauer contó que se le ocurrió la idea mientras esperaba en su auto que le realizaran un análisis de sangre para detectar anticuerpos de COVID-19.

Uno de los pacientes que se sometió a la práctica, Arman Ohevshalom, de 36 años, esperaba en la fila de autos con su esposa, para aplicarse las inyecciones por primera vez. “Es muy creativo, y después de ver cómo lo están haciendo, me siento tan cómodo como en la oficina", opinó.

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Esta nueva modalidad despertó los reclamos y las críticas de los tatuadores de Florida, que aún no tienen permitido reabrir sus comercios para atender a sus clientes. Según el Florida Professional Tattoo Artist Guild, en Florida hay unos 10.000 tatuadores que tienen esa profesión y viven de esa actividad económica.

En tanto, mediante un comunicado oficial del condado de Miami-Dade, se detalló que el alcalde Carlos Giménez aún no fijó una fecha para reabrir esos comercios. "Está trabajando con miembros de la industria y los expertos médicos para encontrar la mejor manera de reabrir de manera segura", asegura la información.

A.G./