Isla Margarita - Los doce países que participan de la cumbre en Venezuela celebraron la decisión del gobierno de Néstor Kirchner de dar por terminada la declaración de cooperación conjunta argentino-británica en la exploración y explotación de hidrocarburos en la zona.
"Reafirmamos nuestro respaldo a los legítimos derechos de la República Argentina en la disputa de soberanía con el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte relativa a la Cuestión de las Islas Malvinas", sostiene el texto aprobado por unanimidad en la cumbre.
Los jefes de Estado suramericanos alentaron "enfáticamente" a los gobiernos de Argentina y del Reino Unido a "reanudar las negociaciones a fin de encontrar a la mayor brevedad posible una solución justa, pacífica y definitiva de la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur".
En esas tratativas están contemplados también los " espacios marítimos circundantes", de acuerdo con las "resoluciones y declaraciones de la Asamblea General, del Comité Especial de Descolonización y de la Organización de Estados Americanos".
"En este marco, apoyamos la decisión del gobierno de la República Argentina de dar por terminada la Declaración Conjunta argentino-británica del 27 de septiembre de 1995 (...) referida a exploración y explotación de hidrocarburos en el área sujeta a la disputa", remarca el documento.
El canciller Jorge Taiana comunicó el 27 de marzo último la decisión gubernamental de dar por terminada la declaración conjunta argentino-británica referida a la cooperación en actividades "Costa Afuera en el Atlántico Sudoccidental".
Según el comunicado de Cancillería, la decisión de poner punto final a esa declaración se basó en las "graves divergencias de interpretación sobre la aplicación de ese instrumento, que enfrentó a las partes desde el momento mismo de su celebración".
"La divergencia sustancial entre las partes se refirió al ámbito espacial de cooperación para la exploración y explotación de hidrocarburos que la Declaración Conjunta establecía que debía realizarse en las áreas marítimas del Atlántico Sudoccidental sujetas a una disputa de soberanía y jurisdicción" (el área de las Islas Malvinas de 430.000 km2).
Las divergencias se reflejaron en el hecho de que para Argentina la exploración y explotación debía realizarse en el área de 430 mil km2 de las Islas Malvinas, en tanto que para el Reino Unido ese trabajo conjunto debía estar limitado a sólo 21 mil km2.