El jefe de la búsqueda inconclusa del MH370, el avión Boeing 777 que desapareció hace siete años atrás, solicitó llevar a cabo una nueva investigación basada en recientes pruebas obtenidas.
Peter Foley, quien dirigió la investigación multimillonaria basada en la desaparición del avión de Malaysian Airlines, dijo a The Times que estaba de acuerdo con una nueva investigación producida por oceanógrafos y expertos en vuelo.
Luego de analizar los restos de uno de los posibles spoilers de la aeronave, encontrado en Sudáfrica durante el mes de agosto, un grupo expertos afirmó el lunes que los daños indicaron que se había desprendido en una inmersión incontrolada de alta velocidad.
De esta manera, Foley sugirió los restos podrían estar en el fondo del Océano Índico, a 1.200 millas de distancia. Detalló a continuación que sería necesario también inspeccionar el fondo del mar a 70 millas náuticas a cada lado del área objetivo.
Blaine Gibson, quien dedicó gran parte de su vida en los últimos años a buscar los restos, apoyó una tercera búsqueda. El abogado estadounidense de 63 años afirmó que el modelo propuesto por Charitha Pattiaratchi era un caso sólido para otra búsqueda.
El profesor Pattiaratchi, oceanógrafa de la Universidad de Australia, había predicho dónde estarían los escombros un año antes de que se encontrara la primera pieza.
El vuelo nocturno de Kuala Lumpur a Beijing desapareció el 8 de marzo de 2014, con 239 pasajeros y tripulación. Misteriosamente había cambiado de rumbo y había volado hacia el sur hasta que se quedó sin combustible.
Dos búsquedas no pudieron encontrar ningún rastro de la aeronave, pero se encontraron 33 piezas de escombros, clasificadas como probables rastros del MH370. Las mimas fueron localizadas en Mauricio, Madagascar, Tanzania y Sudáfrica.
Un reciente análisis de la ruta de vuelo de la aeronave abre la posibilidad de que los restos del avión puedan encontrarse al oeste del cabo Cape Leeuwin, en Australia.
JFG