"En la Cumbre de los Ministros y Presidentes del Mercosur, Sergio Massa insistió con la idea de usar monedas locales para los intercambios, una necesidad cada vez mayor por la escasez de dólares y la acumulación de déficit comercial que Argentina tiene con Brasil", explicó Jorge Fontevecchia en la apertura de Modo Fontevecchia (Net TV y Radio Perfil FM 101.9) del martes 4 de julio.
El Mercosur formalmente cumple 32 años, pero comenzó antes con Raúl Alfonsín y José Sarney, y un objetivo político más que económico: crear un mecanismo que pusiera a los países sudamericanos libres de cualquier dictadura militar.
En su libro “Geografía y Comercio”, del prestigioso economista Paul Krugman, se explica por qué surgen los cluster de desarrollo en determinados lugares. Lo ejemplifica mediante un mapamundi, y afirma que las "lucecitas" que se ven desde un satélite son las ciudades en donde se concentra el desarrollo.
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Y a partir de esto se puede visualizar claramente dónde se concentra el desarrollo: hay un triángulo en América del Norte, entre Montreal, Chicago y Washington, donde siempre están prendidas las luces. Lo mismo en Europa, en donde hay una concentración mayor de "lucecitas" en el norte.
Mientras que en Sudamérica, esa concentración está en una especie de triángulo conformado por Río de Janeiro, Córdoba y Bahía Blanca. Es decir, el sur de Brasil y la región pampeana argentina, donde en el 15% del territorio sudamericano se concentra el 80% del Producto Bruto.
Para el economista, esto genera una ventaja competitiva para que las industrias radiquen en esos lugares. Y, con la concentración de industrias, se produce una reducción de costos, porque no es necesario tener grandes depósitos, ni producir todo, ya que aparecen Pymes que abastecen a las empresas más grandes que fabrican una parte específica de algún producto. Además, se logra una productividad mayor.
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Las semejanzas que propiciaron una cercanía con Brasil
Con Brasil, se comparte el contexto geográfico y el origen es el mismo. Es que fueron los mismos habitantes precolombinos los que habitaban el sur brasileño y la Mesopotamia y la Pampa argentina. En su gran mayoría hay llanuras, y tienen un clima subtropical con mucha agua natural.
Toda esta conjunción conformó un espacio geopolítico que acercó mucho más a Buenos Aires y San Pablo, que con ciudades de su mismo país. Inclusive, es muy imaginable que en algunos años un tren bala una estas dos ciudades en una cantidad de horas que permita un flujo continuo.
El Mercosur, entonces, tiene para nuestro país la mayor importancia estratégica, más después de la pandemia, en donde la globalización pasó a una etapa de regionalización, en la cual Argentina y Brasil tienen puntos en común para desarrollarlo mejor que nadie en América Latina.
También son los únicos dos países que tienen sistema federal, es decir, donde hay gobernadores, marcando el tamaño de sendos territorios.
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En este contexto, hay una parte negativa que tiene que ver con el comercio. Es que Massa está buscando pagar, sin dólares, las importaciones de Brasil, por eso somos más dependientes.
Por tanto, la real búsqueda del precandidato presidencial argentino es pagar con deuda las importaciones de Brasil, lo cual es tan importante como el swap. La idea de una moneda en común esconde la necesidad de un crédito para no parar la economía en estos meses hasta diciembre.
Sergio Massa y la moneda común
El ministro Massa destacó la convergencia en el uso de monedas locales en el comercio multilateral de la región. “Alivia la presión sobre el uso de reservas y la cuestión cambiaria”, explicó
A su vez, habló de la seguridad alimentaria y energética y su importancia inmediata a nivel global: “Este bloque tiene un papel central en la producción de proteínas y abastecimiento energético. Lo mismo en el caso de Bolivia, Chile y Brasil en cuanto a minerales raros”.
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En estos testimonios se vislumbran dos dimensiones: la primera, financiera, pidiendo un crédito a Brasil para no usar dólares para pagar importaciones. Y, así, no generar un déficit comercial con el país vecino.
Y la segunda es una dimensión económica, apostando a la unión de Brasil y Argentina en cuestiones estratégicas, como la producción de alimentos y, de esta forma, convertirse en cluster en esa área.
El papel de los hermanos menores del Mercosur
Los países menores son Paraguay y Uruguay, se construye como un Estado tapón entre las dos grandes potencias, después de la guerra entre el imperio portugués y las Provincias Unidas del Río de la Plata.
¿Estamos cerca del acuerdo Mercosur-UE?
El mandatario uruguayo Luis Lacalle Pou criticó al Mercosur e insistió en su flexibilización: “Si bien pesa en el concierto internacional, no puede ser que sea un lastre, no estamos dispuestos a que sea un corset en el cual nuestro país no se pueda mover”.
Por su parte, Alberto Fernández, le respondió que “sí somos un lastre, que tomen otro barco”, enalteciendo la unidad del organismo.
En Brasil se critica mucho la importancia que el Mercosur le da a otros países. Por ejemplo, plantean que decenas de estados brasileños son más grandes que Uruguay e incluso que la dimensión de San Pablo es semejante a la de Argentina.
La relación de Argentina con el Mercosur
No pueden tomar ningún barco Uruguay y Paraguay, el futuro de la Sudamérica atlántica lo van a construir Brasil y Argentina. Desde el punto de vista geopolítico pocas veces hubo tantas posibilidades para esta región.
A fines de los ochenta, en Viedma, los primeros dos presidentes democráticos, Alfonsín y Sarney, hablaron del sueño de crear el Mercosur: “Es un desafío para dos pueblos jóvenes que han recuperado su vocación de marchar hacia adelante con la convicción de quienes aspiran a ser protagonistas de la historia”.
Desde hace años, Brasil más que un hermano, es una sociedad comercial-política para el futuro de nuestro país. Daniel Scioli dijo alguna vez que la Argentina no tiene un problema económico, sino de caja, porque tenemos los recursos pero siempre falta dinero para los próximos meses. Y algo de eso hay.
AO JL