Esmeralda Mitre dialogó con Jorge Fontevecchia para Radio Perfil tras haber sido designada presidenta de KMB S.A., la sociedad que tiene casi el 25% de las acciones de La Nación.
¿Cómo es tu vida empresaria presidiendo la primera minoría?
Esto sucedió la semana pasada, es algo nuevo, estoy muy conmovida. Aún no comencé esa vida, pero todo está pasando de una manera muy extraña y rara.
¿Cómo fue la idea, tanto de tu tía como de tus hermanos, de que decidieran colocar en vos la tarea de representar a la empresa que tiene la mayoría de las acciones?
El camino lo hice yo, la que estaba empapada en el tema soy yo, ellos no saben cómo hacerlo y me parece muy criterioso de su parte ponerse en su lugar. Mi tía cree que yo tengo más energía para estar en la presidencia.
Esmeralda Mitre ya está habilitada a participar de las reuniones de ‘La Nación’
Hablemos de cómo va a ser tu tarea. Vos en algún momento dijiste que querías que se respete a la vicepresidenta. ¿Cuál es tu relación con Cristina Fernández de Kirchner? ¿Cuál es tu mirada política?
Pedí a La Nación, especialmente, que se respete al Presidente y a la vice. No tengo relación con ninguno de los dos. Me parece que debe ser criticada pero no que se haga ese escarnio barato. Es muy vulgar cómo se refieren a los primeros mandatarios: en el canal LN+ son muy vulgares.
Una vez dijiste que creés que Mauricio Macri había comprado parte de La Nación. ¿Cuál es tu opinión de Juntos por el Cambio, de Macri y de Larreta?
Me parece que no está mal si fuera de Macri, si es un funcionario público y dice que puede tenerlo. Nosotros como ciudadanos tenemos que saber qué tiene nuestro expresidente, ante todo la ética. Macri tiene muchas maneras de comprar La Nación, no necesariamente poniendo su nombre.
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¿Cuál es tu conjetura? ¿Qué crees que podría estar pasando?
Mi conjetura es que Macri podría ser accionista pero con otro nombre, eso es lo que creo. Son teorías que vengo pensando.
Cuando vos actúes en el directorio, ¿pensás plantear algún cambio en la línea editorial? ¿Tenés la aspiración de poder influir no solo en lo empresarial sino también en lo editorial?
Cuando empecé con esto solo quería lo que era mío, lo que me estaban quitando. El diario es un lugar mágico, increíble. Me pasó algo, un cierto enamoramiento, una vocación. Tengo ganas, sé que es difícil, es un mundo nuevo y voy a entrar de a poco, con cierto criterio. Es un principio esto, pienso ir por mucho más.
¿Qué te llevó a estudiar Letras?
Yo quería ser actriz y, como trabajás cada tanto, psicológicamente necesitaba algo que me diera cierta estabilidad. Estudié Letras más que nada por eso, y por una cultura general del teatro.