El surfer que cumple prisión domiciliaria en Ostende luego de haber sido demorado en la autopista Panamericana y escapado para la Costa Atlántica pidió que le devuelvan la camioneta con la que llegó de sus vacaciones, pero la Justicia hoy se lo negó. Además, mañana le quitarán la custodia policial en la puerta de su casa por cumplirse los 14 días de aislamiento. Pero seguirá controlado.
Federico Llamas (27) se hizo mediáticamente conocido cuando regresó de sus vacaciones en Brasil y fue demorado por personal de Prefectura Naval en Panamericana. El joven fue escoltado por los agentes hasta su casa del barrio porteño de Flores y cuando los efectivos se retiraron, manejó hasta a Ostende. Allí fue detenido y quedó con arresto domiciliario.
La defensa de Federico había pedido que se le devuelva la camioneta Ford Explorer, modelo 1995, que le secuestraron el día que quedó detenido con prisión domiciliaria en la casa de su mamá en Ostende. Con ese vehículo y las tablas de surf en el techo ingresó al país desde Brasil el 24 de marzo pasado. El juez federal 2 de San Isidro, Lino Mirabelli, rechazó el planteo del abogado y ordenó que la camioneta siga confiscada.
Coronavirus: detención, embargo e indagatoria al surfer de la Panamericana
El juez estuvo de acuerdo con el fiscal federal de San Isidro Federico Iuspa, quien en un dictamen había opinado que el secuestro de la 4x4 y el embargo preventivo de 500 mil pesos dispuesto sobre los bienes de Llamas “no eran excluyentes uno del otro” por “el importante perjuicio que las acciones del imputado pueden llegar a generar o pudieron haber generado”.
Mirabelli también ordenó que mañana, cuando ya haya cumplido las dos semanas de cuarentena obligatoria que debe respetar toda persona al regresar de un país del exterior, se le levante la consigna fija apostada en su domicilio. Pero lo seguirán controlando de forma sorpresiva.
“Se lo revisó y los médicos informaron que no tiene ningún tipo de síntomas. De todas maneras, hay orden para que la policía chequee en forma sorpresiva y en distintos horarios que Llamas cumpla con el aislamiento social, preventivo y obligatorio”, indicó a Télam una fuente vinculada al expediente.
Cuando se levante le aislamiento obligatorio, el juez fijará una fecha para indagar Llamas por la infracción de los artículos 205 y 239 del Código Penal, es decir, por incumplimiento de normas tendientes a evitar la propagación de epidemias y por desobediencia.
Coronavirus: los "vivos" que rompieron la cuarentena e indignaron al país
El caso. Llamas fue demorado en la Panamericana el 24 de marzo pasado. El joven le explicó a los efectivos de la Prefectura Naval que se había ido de vacaciones a Brasil el 8 de marzo y que había cruzado manejando al país por la ciudad correntina de Paso de los Libres.
Durante el control, Llamas mantuvo un cruce de palabras con los prefectos y los periodistas que realizaban la cobertura. "Vengo de vacaciones querida, ¿vos dónde te vas de vacaciones? ¿a Miami? Yo no me puedo ir a Miami, me tengo que agarrar el auto e irme de vacaciones acá a Brasil. Yo me fui el 8 de marzo de vacaciones", expresó", fue una de las frases que dijo a los periodistas que hacían la cobertura en ese momento.
Tras la consulta con el juzgado, se decidió escoltarlo hasta el domicilio que figuraba en su DNI, en el pasaje Fabre al 1100, en Flores, para que allí realizara cuarentena obligatoria.
Pero, según quedó registrado en un video de una cámara de seguridad, apenas los móviles de la Prefectura se alejaron, Llamas arrancó la camioneta y se fue del sitio donde le habían ordenado pasar el aislamiento.
Tras verificar que no estaba en ese domicilio, el juez federal Mirabelli ordenó su captura y dispuso una serie de allanamientos, entre ellos la casa de su padre, en la localidad bonaerense Canning, por donde había pasado luego de fugarse.
El surfer fue encontrado en una vivienda de su madre, en la calle Romero al 400 de esa localidad balnearia, la policía le notificó que quedaba bajo arresto domiciliario y con una consigna policial en la puerta las 24 horas del día.