La pequeña Martina, de un año y nueve meses, quien fue hallada este domingo dentro de una alcantarilla junto al cadáver de su madre, en Córdoba, continúa en terapia intensiva según comunicó su tía, Marina Acosta.
La beba había permanecido más de tres días junto al cuerpo de su mamá Paola, a pesar de lo cual continúa recuperándose en un hospital local de una fractura en una pierna y un estado de hipotermia, mientras es vigilada ante posibles infecciones.
En diálogo con el programa Guetap, por radio Vorterix, Marina comentó: "Estamos por recibir un nuevo parte sobre Martina, que está en terapia intensiva. Esta en estado muy delicado. Ayer a la tarde se la veía mejor. Es una luchadora. Y mi hermana dio hasta el ultimo respiro para que ella sobreviva".
"Ella dejó el celular en la casa, y el último mensaje es uno que dice 'voy'. Su expareja Gonzalo Lizarralde fue la primera persona que llamé cuando supe que mi hermana estaba desaparecida, y nunca se preocupó por su hija. El no quiso reconocer a la nena, excelente relación no tenían. No sabemos de amenazas previas, nunca nos dijo".
"¿Por que no se secuestró el celular de mi hermana apenas se supo que estaba desaparecida? A Lizarralde se lo dejó detenido, pero no se secuestró la camioneta, no se revisó el recorrido que él hacia. En la fiscalía me hicieron creer que mi hermana se fue por voluntad propia. Ella jamas se hubiese ido. Si no hubiésemos escrachado la comisaría, hecho una marcha, difundir nosotros la foto, hubiese sido un final peor para Martina. Lizarralde hasta el 20 de agosto no la reconoció, solo cuando le dio el resultado de ADN".
Y concluyó: "Si nosotros no nos hubiésemos movilizado, esto podría haber terminado muchísimo peor. Hay tres nenes que se quedaron sin una madre y este hijo de puta va a pagar. El nene de 16 es el que nos anoticia que ella no estaba, no había vuelto a dormir".
La policía estimó que la niña pasó más de tres días junto al cuerpo de Acosta que fue encontrado esta mañana en el interior de un sumidero en el barrio Villa Urquiza.
