Los ocho jóvenes detenidos e imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa se negaron a declarar este miércoles 19 de febrero ante la fiscal del caso, Verónica Zamboni, y en las últimas horas trascendieron mensajes que dejan al descubierto su accionar en lo sucedido esa madrugada en la puerta del boliche Le Brique.
Uno de ellos, Blas Cinalli, la noche del asesinato de Fernando le había mandado mensajes a un amigo a las 5:15 am: "Nos cagamos a piñas en el boliche. Nos sacaron a todos. Esperamos a que se vaya la Policía y ahí los recagamos a piñas", cuenta el joven en su relato de la noche trágica, según publicó el canal de noticias TN.
Sobre lo sucedido, continúa: "Dos convulsionaron, uno lo mandamos al hospital sin signos vitales. Ahora estamos yendo al Mc Donald's a ver qué pasa", cuenta. En el mensaje siguiente, Cinalli escribe en el chat de Whatsapp: "Amigo, flasheamos, matamos a uno". Luego, el joven dice: "Yo solo quiero fumar flores”.
La última selfie de los rugbiers tras asesinar a Fernando Báez Sosa
Un día después de cumplirse un mes del asesinato, los ocho rugbiers fueron trasladados a la fiscalía de Villa Gesell donde eran indagados por segunda vez con la nueva imputación en la que son considerados “coautores” del homicidio, con el doble agravante de la alevosía, y el concurso premeditado de dos o más personas y las lesiones sufridas por los amigos de la víctima.
De esta forma, la fiscal consideró que los ocho jovenes tienen la misma situación e imputación en el crimen, luego de que en principio acusara a Máximo Thomsen y Ciro Pertossi como coautores y a Luciano Pertossi, Ayrton Viollaz, Matías Benicelli, Lucas Pertossi, Enzo Comelli y Blas Cinalli como partícipes necesarios. Los dos primeros en presentarse ante la fiscal fueron Thomsen y Ciro Pertossi, quienes se negaron a declarar formalmente también ante el juez.
"No sabemos por qué estamos acá. Somos inocentes. Con esta fiscal no vamos a declarar", habrían dicho los jóvenes. No obstante, según publicó Télam, sí le hicieron cuestionamientos respecto a la instrucción y a la anterior indagatoria del 19 de enero pasado, al día siguiente de ser detenidos.
Máximo Thomsen y Ciro Pertossi ante la fiscal y el juez: "No sabemos por qué estamos acá. Somos inocentes. Con esta fiscal no vamos a declarar"
— Vía Szeta (@mauroszeta) February 19, 2020
Al ser trasladados hacia la fiscalía en horas de la mañana, el micro tuvo el inconveniente: se atascó en la arena y no no pudo ingresar al garage de la fiscalía, por lo que los agentes penitenciarios tuvieron que bajar a cada uno de los imputados e ingresarlos a la sede fiscal caminando, esposados por la espalda y con la cabeza gacha. Los otros dos imputados, Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, recuperaron la libertad el lunes de la última semana pero se mantiene su acusación como "partícipes necesarios".
En el día de ayer, la familia de la víctima encabezó la movilización en Buenos Aires frente al Congreso, que se replicó en diferentes puntos del país y en el exterior, con actos en las ciudades de Londres y Barcelona. Allí se pidió justicia además por todos los casos aún impunes, y el cese de la violencia. "Era un chico decente, bueno, que amaba la vida, a su prójimo, quería ayudar a todos el mundo, tenía metas, objetivos, lo que le hicieron nos arruinó la vida a mi esposo, a mí y a todos los que lo queremos", dijo con emoción Graciela, su mamá.
A.G./M.C.