Pasaron seis meses desde que se conocieron las primeras denuncias de abusos sexuales a los jóvenes de la pensión del club Independiente. A esta investigación se la llegó a calificar como “la red más grande de pedofilia” del país, y hasta desfilaron nombres de distintas personalidades como integrantes de esta organización, lo que llevó al procurador general bonaerense a organizar una conferencia de prensa para asegurar que “no había famosos” y despejar dudas con respecto a la investigación. Pero el jueves pasado la causa tuvo un revés judicial inesperado y tres de los acusados recuperaron la libertad, aunque siguen implicados en la investigación.
La Cámara de Apelaciones no reconoció los abusos por los que fueron procesados por la fiscalía y les cambió la imputación, por lo que la pena mínima estipulada para la nueva carátula es de tres años de prisión y es excarcelable. Ahora el árbitro Martín Bustos, el relacionista público Leonardo Cohen Arazi y el representante de futbolistas Alberto Ponte tienen que presentarse ante la Justicia dos veces por semana.
En la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº 4 de Avellaneda, a cargo de la fiscal María Soledad Garibaldi, que lleva adelante la investigación, no esperaban esta resolución de la Cámara. En este sentido, el procurador bonarerense, Julio Conte Grand, reconoció estar “muy sorprendido con el fallo” y enfatizó que “se va a trabajar con el fiscal de Cámara para apelarlo”. Para el procurador, “estaba muy claro todo lo que había ocurrido”. La fiscal acreditó en la “causa Independiente” al menos 15 víctimas. Y según contaron fuentes de la causa a PERFIL, “hay otras veinte víctimas con las que se iniciará otra IPP (Investigación Penal Preparatoria)”.
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Bustos fue el primero en caer detenido. Luego fue el turno del relacionista público, del estudiante Silvio Fleytas, del administrador de consorcios Alejandro Dal Cin y del organizador de torneos de fútbol Juan Manuel Díaz Vallone. El último en quedar detenido fue Alberto Ponte, en un principio por el delito de grooming (acoso a través de las redes sociales), pero luego se lo imputó por un caso de abuso sexual.
La fiscal destacó que se trataba de “una red de abusadores que se contactaban con los juveniles de Independiente para acordar encuentros sexuales a cambio de dinero”. Garibaldi entendió que “los adultos acusados se aprovechaban de la vulnerabilidad de los chicos, que estaban sin sus familias y que habían dejado sus hogares en sus provincias natales para cumplir sus sueños futbolísticos en Avellaneda”. En la causa figuran 15 víctimas, entre mayores y menores de edad.
Pero el jueves pasado, la Sala I de la Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora dio lugar al pedido de las defensas de tres de los acusados y ordenó la libertad de Bustos, Cohen Arazi y Ponte, que habían sido procesados y dictada su prisión preventiva por “abuso sexual ultrajante y corrupción de menores con agravantes”. Los camaristas determinaron que “no están acreditados los abusos” y cambiaron la carátula a “corrupción de menores”, por lo que el mínimo de la pena pasó de cinco años de prisión a tres, lo que es excarcelable.
Los acusados recuperaron la libertad pero siguen imputados en la causa. Dos veces a la semana deberán presentarse ante la Justicia.
Defensas. “Leo sale en libertad porque nosotros pudimos acreditar que no tuvo relaciones con menores”, dice a PERFIL el defensor de Cohen Arazi, Juan José Ordas. A la salida del penal, el otro abogado del RR.PP., Adrián Cornaglia, sostuvo: “La acusación tenía errores y por eso fue revocada la prisión preventiva. Leo Cohen Arazi es inocente de los delitos que se le imputan. Mi cliente tiene la libertad transitoria”.
En la misma línea habló con este diario el abogado del árbitro: “La Cámara entendió que no hubo abuso sexual y cambió la carátula. Ahora espero que el tribunal que los juzgará entienda que no hay corrupción de menores”. Y destacó que “la causa no se va a caer, pero los hechos que comprometen a Martín no son delito, sino que es la sexualidad en el ámbito privado. El menor dijo que fue porque quiso, quería plata y hacía esto hace un año. Podremos discutir si está bien o está mal, si es juzgable desde lo moral, pero no es un delito”. Bustos fue acusado por la fiscalía por abusos a dos mayores de edad y a un menor de 15 años.
Para los letrados, la Cámara entendió que no existe “esa presunta red de abusos de la que hablaba la fiscal”. Fleytas, Dal Cin y Díaz Vallone siguen detenidos, aunque podrían ser liberados. La causa sumó un nuevo escándalo.
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En la Unidad Penitenciaria Nº 40 de Lomas de Zamora pasaron los últimos seis meses el árbitro Martín Bustos y el relacionista público Leonardo Cohen Arazi. Estaban detenidos en un pabellón común, acusados de abusar sexualmente y corrupción de menores, que tenían como víctimas a jugadores de las inferiores de Independiente.
Cohen Arazi salió este jueves por la tarde de la unidad. No quiso hablar con la prensa que estaba en el lugar, pero su abogado tomó la palabra y aseguró que es “inocente”.
Según el letrado José Ordas, el relacionista público estaba “muy mal anímicamente”. Y contó a este diario que sus días en prisión “no fueron fáciles”.
Para el árbitro Bustos tampoco fue fácil sobrellevar los seis meses de encierro, pero según narró su abogado ocupó su mente en la lectura y en la actividad física.
“Martín es ajeno al submundo carcelario, jamás había estado en prisión ni en una comisaría. Ocupó sus días leyendo. Le aconsejé que hiciera ejercicio, ya que es una persona muy activa en ese sentido por su profesión. Además pintó con sus compañeros las celdas”, contó a este diario el abogado Julio Chavarría.
“Del penal salió como atontado, mal anímicamente. Ahora solo quiere reponerse y reencontrarse con sus amigos y familiares”, contó Chavarría. Ambos esperarán el juicio en libertad, porque así lo resolvió la Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora.
