Voceros de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner difundieron un certificado emitido en el Hospital de Clínicas que indica que uno de sus empleados de la senadora se vio afectado por un "tóxico de contacto", lo que según señaló la defensa de la exmandataria ocurrió en su departamento del barrio porteño de Recoleta, tras el allanamiento dispuesto por el juez federal Claudio Bonadio.
En el certificado emitido el sábado pasado en el Hospital de Clínicas, se informa que la persona tratada concurrió a ser atendida con "síntomas de irritación en piel y mucosas".
El especialista que firmó el certificado se refirió a la probable exposición a un "tóxico de contacto" a la vez que sugirió "evitar" esa exposición.
Según denunció este lunes el abogado Carlos Beraldi, a cargo de la defensa de Fernández de Kirchner, la exposición a ese tóxico se produjo en el departamento de la exmandataria, ubicado en el barrio porteño de Recoleta, luego de los operativos realizados allí por orden del juez Bonadio.
La ex presidenta no quiere regresar a su departamento de Recoleta
No es la única acusación que hicieron desde el entorno de la exjefa de Estado sobre los operativos. Según publicó este fin de semana la versión impresa del Diario Perfil, la legisladora no quería regresar a su departamento porque en las 13 horas que duró el allanamiento podrían haber plantado micrófonos y cámaras para espiarla.
El jueves de la semana pasada, efectivos de la Policía Federal ingresaron al edificio donde reside la expresidenta en el marco de los allanamientos dispuestos por Bonadio en la causa por presuntos sobornos en obras públicas, denominada los "cuadernos de las coimas".
B.D.N.
