El dirigente Héctor “Toty” Flores, precandidato a gobernador bonaerense de UNEN, se sumó a la avalancha de críticas que recibió el oficialismo por la muerte de Néstor Femenía, el niño de 7 años de la comunidad Qom que padecía un cuadro de desnutrición. “Es la punta de un enorme iceberg de hambre y enfermedades que se padece en todas partes del país”, lanzó.
Mediante un comunicado, el dirigente social le endilgó responsabilidades por el fallecimiento del menor a “este gobierno pejotista que esconde en un océano de mentiras, desfachatez y caradurismo, porque sabe que es consecuencia directa de un modelo político y económico de corrupción, hipocresía, xenofobia, y gula de poder”.
En duros términos, Flores sostuvo que “la corrupción mata, enferma, destruye”. Y agregó: “Este gobierno nacional y muchos gobiernos provinciales que tienen gobernadores que creen que son ‘señores feudales con ambición de emperadores’, y sus cómplices que han participado de éstos y callaron y aún callan, cargan con la culpabilidad del sufrimiento de centenares de miles de compatriotas y no pocas muertes”.
Silencio. Asimismo, Flores cuestionó la actitud de varios candidatos presidenciales, al decir que no escuchó “a (el líder del Frente Renovador Sergio) Massa y a (el presidenciable radical Julio) Cobos hacer una autocrítica de su paso por esta administración, y mucho menos repudiar las causales de la muerte de este chiquito que se convirtió en emblema del calvario que padecen desde hace años no pocos niños y bebés”.
“No veo tampoco al gobernador Daniel Scioli hacerse cargo de tanta tragedia que también existe en la provincia de Buenos Aires. ¿Qué esperar de un gobernador que ha destruido el sistema sanitario y sigue envenenando con agua con arsénico a muchísimos bonaerenses?”, remató.
