Tratando de reforzar el bloque regional, la presidenta Cristina Fernández se reunió con sus colegas Luiz Inacio Lula Da Silva (Brasil) y Hugo Chávez (Venezuela). Durante el encuentro, Chávez propuso a Fernández de Kirchner y a Lula relanzar el proyecto del Gasoducto del Sur y crear un ferrocarril regional para reforzar la alianza trilateral, durante la reunión que mantuvieron este lunes en Buenos Aires.
"Propuse volver a colocar la idea del Gasoducto del Sur, creo que es momento de retomarlo", señaló Chávez -según consignó la agencia AFP- en una improvisada rueda de prensa tras el encuentro que se extendió por una hora en el Palacio San Martín. El venezolano también informó que "hemos coincidido en la necesidad de crear empresas estatales (con capitales de los tres países) en sectores como el petroquímico y el energético".
Lo cierto es que, más allá del habitual optimismo de Chávez, la hora en que Cristina estuvo reunida con Lula fue tensa. La mandataria argentina cuestionó la posición del vecino país en la fracasada Ronda de Doha, donde Brasil apoyó la liberalización de aranceles en la región, contra lo que proponía la Argentina. Allí Cristina le advirtió a Lula que "cosas como esa" podrían ser "perjudiciales" para la relación bilateral.
En los aspectos formales, los presidentes de la Argentina, Brasil y Venezuela compartieron una reunión trilateral en busca de afianzar las relaciones del bloque regional y de dirimir discrepancias en un contexto signado por los vaivenes del comercio internacional y la crisis de los precios de los alimentos. Al término del cónclave, el canciller Jorge Taiana confirmó que los mandatarios acordaron volver a reunirse el próximo 6 de septiembre en la ciudad brasileña de Pernambuco, para analizar cuestiones referidas a "energía y producción de alimentos".
El proyecto del Gasoducto fue una idea original del líder venezolano que preveía aprovechar la riqueza gasífera de América del Sur mediante un ducto capaz de distribuir en la región hasta 150 millones de metros cúbicos diarios, pero que permanece estancado. La iniciativa preveía que el gasoducto abarcaría unos 8.000 kilómetros y requeriría unos 23.000 millones de dólares.
Chávez, que ofició de vocero de la cumbre, calificó la reunión de "muy importante", señaló que los tres presidentes acordaron avanzar en proyectos concretos en materia energética y gasífera para la región, cuyo contenido se plasmará el 6 de setiembre en Pernambuco. Por su parte, el canciller Taiana sostuvo que "los tres presidentes tuvieron la posibilidad de hablar de la situación regional y del UNASUR", al tiempo que calificó de "muy positivo" el encuentro que sirvió como corolario de la visita de Lula Da Silva a Buenos Aires,acompañado por una multitudinaria delegación de empresarios.
"La reunión estuvo muy bien", contestó escuetamente la presidenta cuando se retiraba de la sede de la Cancillería, tras la reunión trilateral. Ni bien pisó suelo argentino, Chávez señaló que Argentina, Brasil y Venezuela "somos tres países que nos complementamos de manera espectacular. Es un eje que se está conformando; el eje central del sur, del cual va a depender la dinámica de la estructuración".
"El plan imperialista de globalizar el mundo fracaso. Por eso estamos frente a una crisis alimentaria, financiera y moral. Esta integración busca enfrentar esos dilemas", enfatizó el venezolano.
Hoy, Taiana recibirá al presidente Chávez y parte del gabinete de su gobierno, también en el Palacio San Martín, donde tendrá lugar un encuentro con unos 200 empresarios argentinos. Además de Taiana y Chávez participarán de esta jornada, que comenzará a las 9, los ministros venezolanos de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro; y de Industrias Ligeras y Comercio, William Contreras.
Por el lado argentino participarán el secretario de Comercio y Relaciones Económicas Internacionales, Alfredo Chiaradía; el secretario de Industria, Comercio y PyME, Fernando Fraguío; el presidente del INTI, Enrique Martinez; y el subsecretario de Política Latinoamericana, Agustín Colombo Sierra.
Fuente: DYN