El empresario Matías Garfunkel fue citado a prestar declaración indagatoria el próximo 24 de febrero, a las 10 de la mañana, por un caso en el que se le imputa contrabando de piezas de arte y antigüedades a los Estados Unidos. La medida se toma “bajo apercibimiento de ley en caso de ausencia injustificada”, indica el escrito.
La causa se tramita en el Juzgado Penal Económico Nº 8, a cargo del magistrado Gustavo Meirovich y deriva de una denuncia, en el fuero ordinario, por una presunta deuda por honorarios impagos del empresario con el abogado Adolfo Alejandro Verra. Este letrado figura en registros públicos como director de una empresa de Raúl Moneta, Arena Entertainment SA.
En el proceso por la deuda reclamada, el denunciante indicó que había bienes embargados como garantía de esa deuda. Se trataría de una serie de piezas de colección de alto valor, que luego aparecieron en una subasta en la tradicional casa Christie’s de Nueva York –líder mundial en venta de arte y colecciones–, explicó una fuente al tanto del expediente.
Entre las piezas subastadas que habrían pertenecido a Garfunkel –y, según la opinión del magistrado, existen elementos para sospechar que fueron contrabandeadas a los Estados Unidos– había un mueble del diseñador francés Art Déco Jacques Emile Ruhlmann y una escultura del italiano Rembrandt Bugatti, hermano del famoso diseñador de autos.
Por iniciativa del magistrado a cargo del caso en el fuero civil, se inició la causa en el fuero penal económico con el fin de determinar si habían sido contrabandeadas a Norteamérica para su venta en subasta, sin cumplir con las estrictas normas vigentes para la exportación de este tipo de bienes con alto valor cultural y artístico.
La fiscal a cargo de la instrucción, Carolina Robiglio, titular de la Fiscalía Penal Económica Nº 1, solicitó a inicios del año pasado una serie de medidas probatorias para determinar si se había cometido el delito de contrabando y evasión impositiva. Entre las medidas realizadas, indicaron a PERFIL fuentes judiciales, se solicitó información precisa a la Aduana y la AFIP. Estos fueron los elementos que motivaron la decisión del juez.
A partir de las pruebas recabadas por iniciativa del Ministerio Público, el juez Meirovich emitió un dictamen el día 14 de diciembre al que accedió PERFIL de forma exclusiva. Allí, Meirovich indicó que “corresponde citar a prestar declaración indagatoria a Matías Garfunkel”, en virtud del “cuadro presuncional que conforman el plexo probatorio adquirido en la presente tramitación”.
El juez aclaró que la citación se realiza “sin perjuicio” de la falta de definición sobre si existiría un concurso “real” –dos tipos penales– o “ideal”. Este tecnicismo es de vital importancia, porque definirá, en caso de que se compruebe la existencia de delitos y se avance en una sentencia, si se computa una sola pena o se agregan las penas previstas por los distintos ilícitos.
Medios en conflicto
Además de la citación a indagatoria, Matías Garfunkel está involucrado en la polémica por la crisis del Grupo 23 de medios, donde tiene una participación societaria junto a Sergio Szpolski.
Garfunkel intentó despegarse del conflicto desde Twitter, al aducir que “tanto el manejo editorial como financiero está en manos de Szpolski”. Los representantes de los trabajadores, a los que se les adeuda el sueldo desde el año pasado y enfrentan el cierre de varios medios, salieron a repudiar su actitud en un comunicado donde lo calificaron de “hipócrita”. Según explicó a PERFIL el delegado de Sipreba en Tiempo Argentino, Randy Stagnaro, ayer anunciaron, de forma verbal, que no se pagarían los salarios adeudados en Radio América y despidos en el diario gratuito El Argentino.