Ernesto Sanz, Martín Lousteau y Daniel Salvador dieron el presente este lunes en el Comité Nacional de la Unión Cívica Radical para acompañar el reclamo de organizaciones juveniles del partido, que “exigen” a los senadores de la fuerza que acompañen el miércoles con su voto a favor del Proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).
El bloque radical en el Senado no tiene una postura orgánica sobre el aborto legal: nueve de los doce legisladores de esa fuerza ya anunciaron que votarán en contra de la iniciativa, lo que los transforma en el bloque que más apoyos aportará al rechazo. A favor sólo votan Luis Naidenoff, Pamela Verasay y Eduardo Costa, lo que provocó una fuerte interna en el partido.
La presentación en el Comité estuvo a cargo de la titular de la Juventud Radical, Luciana Rached; el secretario general de la Franja Morada, Juan Pablo Cebrelli; el presidente de la Federación Universitaria Argentina, Bernardo Weber; y la dirigente feminista del radicalismo Pamela Martín García, quienes junto a unos 300 jóvenes pidieron a los senadores que den el sí a la iniciativa.
El No al aborto se consolida para frenar la ley el 8A
"El radicalismo tiene que salvar esta ley", fue la consigna de la actividad en la sede nacional de la UCR. A esta demostración de fuerza de la juventud radical asistieron también los diputados y diputadas que votaron a favor de la ley el 14 de junio -cuando obtuvo la media sanción- y dirigentes de todo el país, entre los que se destacaban el vicegobernador de la Provincia de Buenos Aires, Salvador, el ex senador Sanz y el diputado Lousteau, recientemente afiliado al partido.
Rached resaltó ante la prensa que el radicalismo es "el partido político de los derechos humanos de ayer, de hoy y del futuro, de la ampliación de derechos: la patria potestad compartida, el divorcio vincular, el artículo 14bis y el sufragio universal".
"Los abortos clandestinos existieron y existen. Desde siempre las mujeres abortan. La aprobación o rechazo de esta ley impactará en decenas de miles de mujeres, que anualmente sufren las consecuencias del aborto clandestino: infecciones y muertes. Nos queda ser responsables y legislar sobre una realidad", insistió la joven dirigente del radicalismo.
Cebrelli advirtió por su parte que "la juventud ya no pide, exige que Argentina se ponga a la vanguardia de la lucha por la igualdad de mujeres, hombres e identidades disidentes, que le sean reconocidos a las mujeres sus derechos, el derecho a decidir sobre sus propios cuerpos, el derecho a no morir en la clandestinidad, el derecho a abortar en condiciones dignas".
"Diversas generaciones de la Unión Cívica Radical nos encontramos acá, como desde hace 128 años luchando por ser cada día más libres, iguales y con el pleno goce de nuestros derechos humanos", sostuvo Pamela Martín García, integrante de la comisión de Cabildeo de la Campaña nacional por el derecho al aborto legal seguro y gratuito.
"Les exigimos a los senadores de la UCR que voten por la despenalización y legalización del aborto", reclamó la dirigente feminista del radicalismo". "No habrá ni olvido ni perdón para quienes voten en contra de la vida y la salud de las mujeres. El derecho a decidir está en nuestros principios, en nuestra historia, en el compromiso de nuestras mujeres" sentenció.
"No habrá ni olvido ni perdón para quienes voten en contra de la vida y la salud de las mujeres". Pamela Martín García.
Julio Cobos y Ángel Rozas, inseguros. Por su parte, la dirigente radical María Luisa Storani aseguró este lunes que "hay dudas" sobre cómo votarán el miércoles el proyecto de ley de aborto legal los senadores de la UCR Julio Cobos y Ángel Rozas, quienes ya han anunciado su voto negativo, aunque se mostró confiada que en las próximas horas "cambien su postura".
"Hay dudas en 2 o 3 senadores de UCR. Cobos es uno, que lo estamos trabajando y pensamos que está a favor. Tenemos la ilusión de que cambie su postura, como Ángel Rozas", señaló la actual diputada parlamentaria del Mercosur por Cambiemos.
En ese sentido, sostuvo que la ilusión se centra en los legisladores que “no están demasiado seguros”. "Tenemos la ilusión con algunos senadores que no están demasiados seguros. Sabemos lo que pasa en el interior, los presiona la Iglesia diciéndoles que no van a ser gobernadores, por ejemplo", puntualizó en declaraciones a radio Led.