“Si todos los que votaron en Diputados la reforma jubilatoria insisten, el veto se rechaza”. El razonamiento parte del bloque del radicalismo y aunque suena sencillo todavía falta mucho para poder convertirse en realidad.
La sanción definitiva en el Senado de la reforma previsional y el inmediato anuncio del presidente Javier Milei sobre su convicción de vetarla de manera completa activó en Diputados un nuevo capítulo para mantener con vida el proyecto.
La Constitución contempla que, en el caso de que el Ejecutivo decida no promulgar una ley y, por el contrario, la vete, el Congreso puede insistir con el proyecto con los dos tercios de los votos en cada una de las cámaras.
También establece que el trámite debe comenzar por la cámara de origen, por lo que la pelota vuelve del lado de Diputados. Según supo PERFIL, menos de 24 horas después de la votación en el Senado ya se activaron los mecanismos para convocar a la Comisión de Previsión y Seguridad Social, que encabeza la radical Gabriela Brower de Koning.
En rigor, el nuevo dictamen no es del todo necesario porque en el recinto también se necesitarían igual los dos tercios para activar el tema sin despacho de comisión. Sin embargo, la convocatoria tiene que ver más con lo político y con la necesidad de consolidar los votos ya obtenidos y de intentar engrosar incluso esa cifra.
El acta de votación del pasado 5 de junio marca 160 votos a favor, 72 en contra y 8 abstenciones. Con esa cantidad de diputados presentes (240), se alcanzaron los dos tercios que la oposición dice que ya tiene. Pero al mismo tiempo el foco está puesto ahora en los 17 ausentes de esa jornada. Si aumentan los presentes, aumentará también la cantidad de votos positivos para llegar a esos dos tercios.
Dentro de ese pelotón de ausentes hay, por ejemplo, siete integrantes del PRO. María Eugenia Vidal fue una de las que defendieron en esa sesión la necesidad de cambiar la fórmula pero luego se ausentó al momento de votar. Es que la exgobernadora estaba a favor de un cambio pero acordado con el gobierno nacional, lo cual finalmente no sucedió.
El dictamen aprobado, incluso, no fue el de mayoría de Unión por la Patria sino uno acordado por UCR, Hacemos Coalición Federal, la Coalición Cívica e Innovación Federal, al que se sumaron los artículos 4 y 10, precisamente lo que está causando la discordia máxima con el oficialismo por su costo fiscal.
Encuentro Federal ya dejó en claro ayer su voluntad de dar la pelea en el recinto y en un comunicado señaló que “las amplias mayorías que respaldaron esta medida enviaron un mensaje inequívoco de legitimidad que el Gobierno no debiera ignorar”.
Entre las abstenciones de la votación en Diputados figuraban además los cinco integrantes del Frente de Izquierda, disconformes con el volumen que significaba el eventual aumento para los jubilados. Sin embargo, uno de sus miembros, Christian “Chipi” Castillo, cuestionó este viernes que “vetan un aumento módico a los jubilados mientras perdonan deudas a los empresarios evasores. Todo dicho. A derrotar el veto con la movilización popular”.
Si bien hubo votos a favor del PRO en el Senado, los cálculos que la oposición realiza en la Cámara baja son contemplando que el bloque de diputados de Cristian Ritondo repita los votos en contra de la primera ronda, aunque las idas y venidas de Mauricio Macri y Javier Milei no permiten anticipar de manera clara la estrategia.
“Adivina, adivinador, quién es más cruel con los viejos y los niños, Javier o Mauricio. No sé, pero del cielo esto no viene”, disparó Elisa Carrió para herir por igual a Milei y a Macri, con quien supo tener una alianza estratégica en Juntos por el Cambio pero que no se cerró en buenos términos, sobre todo en lo personal.
“No recibimos órdenes”
El bloque de senadores del PRO, que encabeza Luis Juez, salió este viernes a hacer varias aclaraciones sobre la votación del último jueves por la reforma jubilatoria y, luego del ataque que recibió por parte de Mauricio Macri, jefe partidario, indicó que “somos parte de un partido político, a cuyas autoridades siempre informamos sobre nuestros pasos pero no recibimos órdenes”.
De los seis integrantes del bloque, cinco lo hicieron a favor: Guadalupe Tagliaferri, Luis Juez, Alfredo De Angeli, Martín Goerling y Victoria Huala, mientras que Carmen Álvarez Rivero votó en contra. No obstante, hubo votos en contra en particular para los artículos 2, 4 y 10, aclararon en el texto. “Nuestro bloque tiene criterio propio para decidir cómo votar. Lo hacemos de acuerdo a nuestras convicciones y al trabajo realizado en comisión”, señalaron. Y lanzaron sin dar nombres: “Nos sorprendió que dirigentes que creíamos cercanos y, a quienes conocemos desde hace años, nos atacaran sin consultar o informarse primero”.