El presidente Mauricio Macri, junto a parte de su gabinete y de su tropa en el Senado, recibió ayer a los senadores del peronismo disidente, con el objetivo de conseguir consenso para el envío de los pliegos de los ministros de la Corte Suprema que hasta ahora fueron designados “en comisión”, pero que aún no juraron. “Estamos abiertos a escuchar a todos los sectores y corregir lo que haya que corregir”, expresó el mandatario, en una clara señal de acercar posiciones luego de la polémica que despertaron las designaciones. Se trata de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, quienes, por un decreto de necesidad y urgencia, fueron nombrados para ocupar las vacantes de Carlos Fayt y Eugenio Zaffaroni en el máximo tribunal. Sin embargo, los movimientos del Gobierno parecen ir en la dirección de desandar ese camino y obtener los votos para que los pliegos tengan acuerdo del Senado antes de la jura. Encabezado por Adolfo Rodríguez Saá de San Luis, el Interbloque contó con la presencia de ocho sobre diez senadores, todos referenciados bajo la órbita del peronismo no kirchnerista. Los ausentes fueron el senador Guillermo Pereyra de Neuquén y Carlos “Lole” Reutemann, de Santa Fe. Este último, sin embargo, forma parte de Cambiemos, la coalición gobernante, frente por el que fue electo senador en las últimas elecciones. Participaron, además, la vicepresidenta Gabriela Michetti; el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo; el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis; y Paula Bertol, secretaria de Relaciones Parlamentarias. La reunión comenzó a las nueve y media de la mañana en el salón norte de la Casa Rosada. Y para los senadores del Interbloque Federal fue muy positiva. “Coincidimos con el presidente Macri en la necesidad de llegar al consenso para obtener los dos tercios que se necesitan para aprobar los pliegos de la Corte”, dijo el senador Rodríguez Saá. “Hemos expresado nuestra posición de tener una relación amigable en el Senado con el gobierno nacional”, agregó. Junto a él estuvieron su comprovinciana Liliana Negre de Alonso, Roberto Basualdo (San Juan), Juan Carlos Romero (Salta), Miriam Boyadjian (Tierra del Fuego) y Lucila Crexell (Neuquén). El Interbloque está dispuesto a acompañar al Ejecutivo siempre y cuando no haga jurar a los dos abogados antes de que obtenga el acuerdo del Senado. El problema que tiene el Gobierno es que para ello necesita también del aval del Frente para la Victoria, que tiene más de cuarenta senadores. Una fuente kirchnerista dijo que estarían dispuestos a acompañar los pliegos si Macri da marcha atrás con el decreto
