El jefe de Gabinete de ministros de la Nación, Marcos Peña, se refirió este domingo en una entrevista con PERFIL a los desafíos que tiene su puesto. Según sostuvo, debe funcionar como un pararrayos del presidente Mauricio Macri.
—¿Larreta y Vidal pidieron involucrarse en la gestión?
—Surgió en la conversación. Nos sentimos mucho más cómodos teniéndolos cerca. Los primeros dos años en los momentos más difíciles estuvieron acá. Cuando hay una situación difícil están en dos minutos acá poniendo el hombro.
—Vidal tiene la teoría de que muchas críticas que recibe se deben a que no se quieren pelear con Macri.
—El cargo del jefe de Gabinete fue diseñado para recibir críticas. Está bien, es así, es un pararrayos y viene con el cargo. En algunos casos será para criticarme a mí y otras por ese mensaje elíptico. Pero no es un cargo para susceptibles. De hecho, muchos que ocuparon este rol fueron muy susceptibles.
—¿Los vicejefes de Gabinete, Quintana y Lopetegui, están corridos y desdibujados?
—No. Son dos lujos para la Argentina. Son centrales para el día a día. Es un rol que no existía: dos personas dedicadas al seguimiento de la gestión. En ese sentido siguen adelante trabajando con un enorme compromiso y con enormes resultados. Es contracultural trabajar con equipos.