La mujer que increpó al gobernador bonaerense Axel Kicillof en un acto en Brandsen contó qué ocurrió luego de que la sacaran del escenario y aseguró que no es militante. Ella se llama Fernanda y dijo que solo quería hacer un planteo de sus preocupaciones. "Cuando me sacaron no me querían dejar ir, me decían que estaba mintiendo”, contó.
"Yo no milito en nada, soy una simple ciudadana que se acercó a plantearle las preocupaciones que tenemos todos", afirmó Fernanda en diálogo con LN+ y aclaró: "Eso de que violé la seguridad es mentira. Ni siquiera había seguridad".
"Como se ve en el video, yo estaba parada porque estaba por finalizar el acto. Entonces, me acerco, voy caminando (hasta donde estaba el gobernador) y ahí te das cuenta de que no violé la seguridad. No hubo gritos ni corridas porque no había nadie", repasó.
La mujer contó que fue al acto para hablar con Kicillof, que llegó unos minutos antes para poder acercarse a él. "Uno siempre va y trata de que lleguen cartas, pero es difícil. Como estaba por terminar el acto y no había seguridad, fui tranquila y lo saludé. A lo último sí me desesperé y me puse nerviosa porque tuve miedo más que nada. Me shockeó la reacción", relató.
La mujer que increpó a Kicillof: "Me sacaron violentamente"
"Le estrecho la mano y le digo que era una ciudadana que quería expresar algunas problemáticas que había en la ciudad y me dice 'cuando termine yo de hablar'. Le digo que espero, se ve que hago el gesto con la cabeza, pero automáticamente aparecen estas personas que me tiraron al piso y me sacaron violentamente", explicó la Fernanda.
"Me tiraron al piso, me llevaron violentamente para afuera, cuando yo simplemente me acerqué a hablar, nada más. La verdad que no esperé semejante reacción, tan violenta", reconoció Fernanda, a quien el personal le preguntó dónde militaba, según informó.
"Cuando me sacaron no me querían dejar ir, me decían que estaba mintiendo. Las personas que me rodeaban me trataban de mentirosa. Llegó un momento que dije 'basta' y empecé a pelear y hacer fuerza para que me dejen ir", continuó.
Fernanda contó que una vez liberada vivió una situación extraña cuando poco después se presentó un policía en su casa. "Se presentó un oficial junto con otro civil en un auto particular. Me dijeron que querían hablar conmigo. Les dije que sí, que no había problema, pero cuando le pedí el nombre y apellido no me lo quiso dar y se fueron", contó.
Luego del incidente el concejal del Frente de Todos Fernando Raitelli, se comunicó con ella y le dijo que el gobernador estaba dispuesto a atenderla. "Él me dijo cuándo iba a ser la cita y el horario para presentarme en la gobernación, que Kicillof está dispuesto a atenderme. Le dije que no había problema, que lo mío siempre fue el diálogo y el respeto. Quedó en llamarme para confirmar", detalló.
RB / ED