—¿Por qué quiere ser gobernador?
—Porque estoy convencido de que puedo empezar un proceso de transformación en educación, salud, seguridad y sacarle la pata de arriba de la cabeza al productor.
—¿Qué es lo peor que ve de la gestión de Kicillof?
—La seguridad. Me lo dicen todos los bonaerenses. La gente corre para tomarse el colectivo en ruta 3 cruzando toda La Matanza. Los colectivos se toman en los semáforos y no en las paradas, la gente vive con miedo. El Estado se ha corrido de la calle y es de los delincuentes.
—¿Por qué no hubo debate con Grindetti?
—Porque todos acordamos que el debate era después con el kirchnerismo. Es lo que hay que hacer para seguir recorriendo, y además para no darle de comer al kirchnerismo en cruces que después los pueden usar los últimos días.
—Algo bueno y algo malo de Grindetti.
—Tiene una buena gestión en Lanús. De lo malo no hablo en referencia a compañeros míos.
—¿Qué propuestas son las centrales?
—Primero: poner la policía en la calle, respaldarla y enfrentar el delito y el narco. Quiero devolver la paz al bonaerense. Voy a trabajar para sacarles la presión fiscal a los productores: desburocratizar, bajar tasas. Me comprometí en ayudarlos. Y alfabetización: quiero que los chicos aprendan a leer y escribir. No puede ser que solo 16 chicos de cada cien terminan el colegio en tiempo y forma.
—El PJ unido nunca perdió una elección ejecutiva en la Provincia.
—Perdieron en 2021 y estaban unidos, y les ganamos. Siempre hay una primera vez.
—¿No fue un error no haber permitido una “V” para más intendentes para que llevan a Larreta y Bullrich en sus boletas?
—Le hubiera dado a todos una “V”. Son 22 del PRO y 32 radicales: 54 sobre 135. Nos costó mucho construir los espacios que tenemos, las gestiones que tenemos. No quiero poner en riesgo a ningún distrito de JxC. Nuestro adversario es el kirchnerismo.
—¿Por qué Larreta debería ser presidente?
—Estoy con él hace veinte años. Hemos dado batallas muy fuertes con él y los cambios se ven: en la educación, en la seguridad, enfrentamos al narco y al delito. Es una persona de gestión, está preparado y lo que requiere la Argentina es gestión para salir adelante. Tenemos todo para ser una potencia. Tenemos la capacidad de duplicar exportaciones y quien puede llevar eso a cabo es Horacio.
—En caso de que gane Larreta, ¿no cree que será difícil llevar adelante un gobierno?
—Sí, por supuesto. Si no, la Argentina estaría volando y hubiéramos saldado los problemas. Inflación: el Gobierno con más inflación con 503% acumulado.
Se quejaban del período de Cambiemos: 209%. En Provincia: 800 mil pobres más. Endeudamiento: se quejaban de Macri, Cristina lo dejó en 151 mil millones, Macri 46 mil millones más y ahora 276 mil millones más. El trabajo no crece. No es fácil lo que viene pero es posible.
—¿No ve un poco desmadrada la interna Bullrich-Larreta?
—No hay que dramatizar. En las primarias se dicen cosas, tenemos que tratar de ser propositivos. Tiene que haber un búnker unificado, tenemos que tener esa noche una foto de todos y soy de los que creen que al otro día vamos a estar trabajando todos juntos. Lo hice en 2021 con Facundo Manes. Yo fui donde Facundo quería que fuera.
—¿Por qué Macri no se expresó aún?
—Mauricio tiene dos personas de su espacio como precandidatos a presidente y dos de su espacio para gobernador. Entonces está acompañando el proceso. Y está siendo muy prolijo como líder y creador de JxC. Obviamente que cuando termine la competencia estaremos todos juntos caminando.
—¿Qué implica que Massa sea el candidato del kirchnerismo?
—No, Massa es el kirchnerismo. Alberto, CFK, Massa, Axel, son el kirchnerismo. Implica continuidad o cambio. Si querés seguir con estos niveles de presión fiscal, de inseguridad, de inflación, votá al ministro de Economía.
—¿Observa un escenario de tres tercios con Milei o una polarización de JxC contra el oficialismo?
—No sé, es una incógnita. Los veo mejor posicionados a JxC y al oficialismo pero hay mucha bronca y pueden darse los tres tercios.
—¿Se ve un efecto Milei en el Conurbano?
—Veía un efecto más potente antes, ahora no tanto. Lo veía en la calle, ahora no se ve tanto. Estamos hablando de la sociedad que ya decidió el voto y el 50% de la población no decidió a quién va a votar. En estos días que restan se va a definir la elección.