Visiblemente nervioso, el empresario Sergio Szpolskii se enfrentó a un grupo de periodistas a la salida de su presentación en el juzgado de Claudio Bonadio , en el marco de su indagatoria por el caso de los cuadernos de las coimas.
Fue este mediodía, en el hall del cuarto piso de los tribunales de Comodoro Py, adónde había pedido interrumpir su declaración indagatoria por el Shabat, que comienza 18 minutos antes de la puesta del sol del día viernes. En el caso de hoy, está previsto a las 18:34.
El magistrado lo autorizó y Szpolski deberá volver el lunes a tribunales para continuar su indagatoria. El nombre del polémico empresario apareció en el caso luego de que se conociera que figuraba en la planilla de un pen drive de Martín Larraburu -ex secretario de Juan Manuel Abal Medina y otro de los procesados en la causa- como receptor de 200 millones de pesos. Szpolski es defendido en este caso por el penalista Santiago Blanco Bermúdez, cuyo cliente más famoso es el ex espía Antonio “Jaime” Stiuso.
En su breve presentación en el juzgado, Szpolski admitió haber recibido el dinero. Dijo que fue de manos del fallecido dirigente justicialista Jorge “Chueco” Mazon y que fue para imprimir boletas. Lo que hizo, aseguró, en el mismo taller donde imprimía el diario Tiempo Argentino, que era de parte de su grupo empresarial. Negó los cargos que se le imputan y antes de entrar a declarar afirmó a la prensa que nunca pagó retornos.
Tras la interrupción de la presentación y a su salida del juzgado llegó el cruce de Szpolski con los periodistas. Allí se mostró atolondrado y sus titubeos se exacerbaron cuando fue consultado por los desmanejos en sus negocios, que dejaron a cientos de trabajadores en la calle y sin sus aportes realizados. “No me siento responsable de lo que pasó con los trabajadores del Grupo 23”, dijo Szpolski.