"Esto es caviar", se escucha en medio de la fábrica de alfajores Guaymallén. Frente a la cámara, su dueño, Néstor Hugo Basilotta, compara el nivel que tiene el dulce del producto conocido como "triverde". "¡32 gramos de membrillo puro! Esto no existe en ninguna parte del mundo", agrega con énfasis y orgullo. El video se sube a Twitter y llegan los mensajes de apoyo, pero también las críticas bromatológicas: Basilotta dejó la cuchara con la que comió adentro del pote de membrillo. Horas después tendrá que aclarar, en otro video, que ese envase salió de la producción para la toma, ya que él se lo llevó para comer en su casa. No importa, todo suma: este empresario de 67 años hizo de las redes sociales una plataforma inédita para vender un producto de precio popular en un segmento, el de los alfajores, saturado de ofertas premium. Y en el camino se convirtió en una estrella de la web.
"Comió de la cuchara que se usa para cargar la máquina y volvió a dejarla adentro del pote No me como uno de esos por 2 años" o "hasta estar segura que la saliva de esa cuchara no tiene chance de llegar a mi boca", fueron algunos de los comentarios de los usuarios que recibió su posteo. Ni lento ni perezoso, el empresario se tomó el tiempo para salir a aclarar: "Hay muy pocos industriales que se atreven a mostrar su planta productiva en las redes, pero yo lo hago con orgullo. Tenemos una de las plantas más higiénicas y automatizadas del país, por eso quiero explicar que ese pote una vez abierto no puede entrar a la producción".
Sin haber estudiado marketing digital, Basilotta deja a más de uno con la boca abierta ante sus filmaciones. Con más de cuatro décadas al frente de la fábrica que hoy produce 2 millones de alfajores diarios, este hincha de Vélez y aficionado al boxeo cuenta a PERFIL el "secreto" para mantener vigente en el mercado —a pesar de las crisis económicas del país— una marca que evoca a calidad y pertenencia.
"Para bien o para mal quien no está en las redes sociales hoy no existe. Me gusta debatir con la juventud y escuchar las ideas que tienen. Hay pocos empresarios o industriales que se muestren en redes sociales y den la cara, en mi caso trato de ponerle un poquito de humor a todo. Muestro cosas que se me ocurren a mi, es un proyecto con el que me entretengo. Permanentemente escucho en las redes lo que quiere la gente y esa es la ventaja porque muchas veces a uno le abren la cabeza", explica el ejecutivo a este medio.
En Twitter, Basilotta acumula más de 32 mil seguidores: "Un día subí un video y se viralizó y ahí seguí. Trato de no meterme en política y de tener mucho cuidado porque en redes hay mucha gente anónima que ataca y es difícil entrar ahí, pero es una marca muy querible y de muchos años. Me gusta mostrar y que respondan y eso me sirve para un marketing importante", señaló.
El "secreto". El hombre está a cargo de la empresa fundada por su suegro en 1945, que hoy cuenta con 200 operarios. ¿Cómo hizo para surfear todas las crisis argentinas? Él aventura una clave: "La relación precio-calidad". "Creo que para el precio que tiene, el alfajor posee mucha calidad. Nosotros usamos el mismo dulce de leche que usan los alfajores de $60, $70 y $80. Nuestro alfajor se consume en todas las clases sociales: el público cuando se fija en los precios, donde uno nuestro simple vale entre $10 y $15 pesos, y un triple vale de $20 a $25, y alfajores de la competencia -que son muy buenos porque los mejores alfajores están en la Argentina-, valen tres veces más, y por eso la gente elige consumir los nuestros", explica.
Una exposición que no es nueva. Basilotta sabe cómo llamar la atención. Si bien ahora encontró su espacio en la red social, hace unos años puso la mira en un importante evento deportivo y las cosas le salieron mejor de lo que esperaba. Y es que este aficionado al boxeo supo inmiscuir su marca en la transmisión de la pelea del argentino Marcos ‘Chino’ Maidana versus Floyd Mayweather en Las Vegas en mayo del 2014. "Seguí toda la campaña de Maidana y lo fui a ver y ahí le di un alfajor para que entrara al ring, se lo quisieron sacar pero él lo abrió y se lo comió. Después peleó 12 rounds con uno de los mejores del mundo. Eso seguro lo vieron 30 millones de personas. Fue muy lindo para nosotros", recordó Basilotta sobre ese momento.
Si bien aclara que no le gusta meterse en política porque lo único que desea es que al país le vaya bien, sí reconoce que luego de ese momento que fue televisado, la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner lo recibió. "También me reuní con Raúl Alfonsín en su momento", remarca para dejar en claro que no tiene problemas con ningún político.
Orgulloso de haber estado con la Presidenta @CFKArgentina . Muchas gracias por habernos recibido !!!!!!!!! pic.twitter.com/u1bZkWDetq
— N.Hugo Basilotta (@nhbasilotta) May 16, 2014
Para mantenerse vigentes y competir, la empresa tiene un lema que Basilotta no se cansa de repetir: "Siempre nos fue bien porque seguimos una política que nos marcó mi suegro: mucho volumen, poca rentabilidad. Estamos contentos por cómo nos va, tenemos colegas de pymes de otros rubros que no les ha ido bien. Si bien no me gusta meterme en política, a los videos les pongo humor para evitar que haya peleas como las que tenemos los argentinos por ese tema". Por ello, auguró: " Creo que tenemos el mejor país del mundo pero no lo sabemos aprovechar. Ojalá a este nuevo Gobierno le vaya bien y mejoremos".
FDS/FF