Los dos menores presos por el asesinato del empresario Andrés Blaquier protagonizaron un violento intento de fuga, cuando eran trasladados por la autopista Panamericana en un vehículo penitenciario.
Aunque el episodio trascendió en las últimas horas, tuvo lugar el pasado 22 de marzo cuando los menores eran llevados nuevamente a los centros de detención en los que estaban alojados, tras asistir a una rueda de reconocimiento por el robo de la moto verde en la que habrían interceptado a la víctima. Los menores están procesados con prisión preventiva por homicidio criminis causa.
¿Cómo fue el violento intento de fuga?
El ataque comenzó cuando uno de los menores gritó “¡ahora!”. Uno de los acusados golpeó brutalmente a uno de los celadores, mientras el otro, desde atrás, le cruzó la cadena de las esposas por el cuello a un segundo guardia, para ahorcarlo.
Al mismo tiempo, los menores detenidos les gritaban al chofer de la camioneta que detenga el vehículo y comenzaron a golpearse las cabezas entre sí y a darlas contra las ventanillas del vehículo con la intención de autolesionarse y culpar a los celadores.
Sin embargo, la acción duró pocos minutos: los guardias pudieron controlar la situación, aunque debieron ser atendidos por politraumatismos y lesiones cortantes en la cabeza.
El crimen de Blaquier ocurrió el sábado 29 de octubre pasado, en el kilómetro 50 de la autopista Panamericana, cuando los dos adolescentes, a bordo de una moto, se pusieron a la par del empresario, que no se resistió al robo y aún así lo balearon y asaltaron con el fin de llevarse la moto BMW GS1200 negra en la que la víctima regresaba al country Martindale de Pilar.