Los docentes porteños lanzaron un paro de actividades presenciales toda la semana, ya que sostienen que no están dadas las condiciones epidemiológicas para el regreso a las aulas. En ese marco, RePerfilAr dialogó con Jorge Adaro, de Ademys, quien argumentó que "hasta ahora la vuelta a la presencialidad, es un rotundo fracaso", y manifestó que " el propio gobierno que incentiva la vuelta a la jornada de revinculación, no se hace responsable si en las escuelas hay contagio".
Bajo el lema "Con la pandemia, a la presencialidad no volvemos", el sindicato optó por parar las actividades presenciales, aunque "seguir trabajando en actividades virtuales". "Todo el que se niegue a ir a las burbujas va a estar contenido y amparado por esta medida del sindicato", agregó. Además, sostuvo que no sólo" hay docentes y gremios que no quieren ir, sino que hay muchísimas familias que no están mandando a sus hijos a las burbujas".
Vuelta a clases: cómo funciona el aula burbuja
En esa línea, Adaro remarcó: "Nosotros estamos planteando, que tanto el gobierno nacional, como el de la Ciudad en vez de hacer marketing, con este supuesto regreso, que se ocupe de lo que tiene que hacer, que es garantizar la conectividad, y las computadoras para todos los docentes y alumnos del país, para que se pueda sostener un trabajo pedagógico", ya que el representante de Ademys, subrayó que en caso de que se produzca un rebrote, como sucede en Europa, "el gobierno no está haciendo la previsión de dar todos los elementos" para no interrumpir el proceso pedagógico que se está haciendo entre los docentes y los alumnos.
Por último, cerró: "Este proceso solo se da por el aporte material de los maestros, y de las familias, porque el gobierno estuvo totalmente ausente. Todo lo pagamos las familias, y los docentes, en términos de conectividad por ejemplo".