El encierro, consecuencia de las medidas restrictivas implementadas para evitar los contagios de coronavirus, tuvo un fuerte impacto en niños y jóvenes, razón por la que se dispararon las consultas psicológicas y psiquiátricas.
"Aumentó la ansiedad y los síntomas asociados al trastorno del estado de ánimo para no decir depresión", afirmó Mariana Moreno, médica especialista en Psiquiatría infantojuvenil, quien a su vez puntualizó: "Los diagnósticos los escribimos con lápiz porque trabajamos con seres que están en desarrollo".
En esa línea, la especialista enfatizó que "cerrar un diagnóstico no es tan sencillo", ya que se trata de niños. Sin embargo, destacó que sin duda que "se están viendo síntomas asociados al estado de ánimo y a la ansiedad con un aumento".
No obstante, Moreno expresó que también muchos pacientes que estaban en tratamiento manifestaron un "retroceso".
"Los adolescentes necesitan ese contacto con el afuera, que es imprescindible para la constitución de esa autonomía que ellos necesitan para seguir desarrollándose", concluyó la médica.