Con temperaturas que alcanzarán los 40 grados de en buena parte de la Argentina esta semana, aumentan las probabilidades de sufrir un golpe de calor.
En este sentido, especialistas del porteño Hospital de Clínicas alertaron sobre el posible aumento de casos en los últimos días como consecuencia de los primeros calores fuertes del año. A fin de evitar este problema de salud, desde el hospital que depende de la Universidad de Buenos Aires (UBA), recomendaron tomar ciertas precauciones a fin de evitar el golpe de calor.
Respecto a los síntomas a los cuales hay que estar atentos ante un posible golpe de calor figuran mareos, sensación de desvanecimiento, palpitaciones, sudoración excesiva al principio y piel caliente, letargo, cefalea, náuseas, debilidad,
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Recomendaciones generales
- Tener una adecuada hidratación. Para esto es aconsejable la ingesta de líquidos, en especial agua, durante todo el día. La cantidad de la misma varía en relación a la edad, sudoración y posibles patologías de la persona. En forma de orientación, dos litros de líquidos fríos por día podría ser adecuado.
- Alimentación hipocalórica. Evitar comidas de lenta digestión y pesadas. El consumo de frutas y verduras es aconsejable.
- Usar ropa clara y fresca, en especial ropa de algodón evitando nylon o poliéster.
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- Uso de gorras o sombreros frescos a la hora de transitar en horas de sol. El uso de anteojos de sol también ayuda.
- Evitar las horas de mayor calor para realizar actividad física o exposición al sol. Debe evitarse hacer ejercicios entre las 11 y las 16 horas.
- Permanece en espacios y ambientes ventilados tanto para realizar tareas habituales como para realizar ejercicios.
- El uso de ducha diaria con agua templada es recomendable a fin de reducir el calor corporal y remover la sudoración presente en la piel.
- Consultar con su médico sobre el consumo de líquidos adicionales o de medicamentos crónicos o nuevos.
Ola de calor y la importancia de tomar agua: cómo evitar la deshidratación
"El golpe de calor es la manifestación clínica del incremento de la temperatura corporal que se da como consecuencia de la falla en el mecanismo de la autorregulación fisiológica cuando existe exposición corporal a ambientes calientes en general por períodos prolongados”, aseguró Damián Zopatti, médico clínico del Hospital de Clínicas.
Por ello, añadió, “el golpe de calor es más frecuente de observar cuando las temperaturas del ambiente son sostenidamente elevadas en días consecutivos y los síntomas son variados: mareos, sensación de desvanecimiento, palpitaciones, sudoración excesiva al principio y piel caliente, letargo, cefalea, náuseas, debilidad, etc”.
Asimismo, aconsejó “consumir 2 litros de agua diarios en un adulto sano es una medida adecuada y, dicha cantidad, se podrá incrementar según las necesidades (por ejemplo realización de ejercicio)”. El especialista remarcó, además, la importancia de “reconocer la necesidad de mantenerse hidratado” y señaló que las personas mayores, suelen volverse menos sensibles a sentir sed, por tal motivo deben recordar y tener como hábito tomar agua.
Por otra parte, Zopatti recomendó incrementar el entrenamiento en forma progresiva ya que “el golpe de calor también se da usualmente mientras las personas jóvenes hacen entrenamiento físico, debido a la pérdida de agua” y aconsejó hacerlo por la mañana temprano o por la tarde, luego de la caída del sol”.
Ante un golpe de calor, señaló que “si la persona es joven, se le debe dar líquidos: la hidratación no debe hacerse solo con agua, es recomendable bebidas con sales o un jugo de fruta y después enfriar el cuerpo”, y si son mayores o bebés y comienzan a sudar mucho, o están demasiado tranquilos o tienen sed "hay que ofrecer líquidos y si se quedan dormidos o se desmayan hay que dar aviso al médico y/o activar el Sistema de Salud”.
Por último, el medico agregó que “el uso de barbijo en verano sumando a realizar las tareas habituales como pueden ser caminar, realizar compras, trámites, etc. no incrementa en demasía la demanda fisiológica de oxígeno si es que todas ellas se realizan de forma tranquila y tomando los recaudos pertinentes en relación a las recomendaciones clásicas sobre la prevención del golpe de calor”.
cp / ds