Mientras la ola pandémica se va aquietando y retorna la “normalidad”, surgen nuevas consecuencias de salud no directamente relacionadas con la infección por SARS-CoV-2, pero sí con el aislamiento y los cierres del año pasado. Entre estas se destaca la caída vertiginosa de visitas de control al pediatra, incluyendo controles básicos como el seguimiento de peso y talla de los chicos. Esos datos son claves para revelar en forma precoz algún trastorno del crecimiento.
“A principios de 2020 se cortaron bruscamente todos los controles pediátricos. Y en esta especialidad es perder las oportunidades para detectar a tiempo problemas de crecimiento”, le explicó a PERFIL Ignacio Bergadá, jefe de Endocrinología Infantil en el Hospital Gutiérrez. “Y lo más preocupante –agregó– es que, si bien la situación se ha ido normalizando, hoy todavía no recuperamos la tasa de consultas pediátricas que teníamos en los años previos a la pandemia”.
Según Bergadá, que también es investigador del Conicet, los problemas no diagnosticados de crecimiento en los chicos son una de las consecuencias no directas que deja la pandemia. “En pleno pico de contagios hicimos los controles pediátricos por medios virtuales. Pero eso impedía pesar y medir a los chicos en forma correcta y periódica. Esto es clave porque los problemas de crecimiento son silenciosos y esas mediciones son la mejor oportunidad para detectar cualquier problema en forma precoz”. En otras palabras, un niño puede estar creciendo menos que lo normal y no tener ningún otro síntoma visible.
Algo similar le resumió a PERFIL la doctora Raquel Piazza, pediatra clínica del Sanatorio Mitre: “La pandemia generó una demora significativa en los controles de los chicos y eso llevó a diagnósticos tardíos en varias patologías. Y si bien muchos padres mantuvieron contacto con el pediatra vía WhatsApp o videollamadas, la ausencia de consultas presenciales nos dejó sin oportunidades para poder valorar el crecimiento y el desarrollo y así lograr la detección precoz de, por ejemplo, posibles alteraciones hormonales”.
Tras la pandemia surgen problemas de salud que se relacionan con el aislamiento
Maduración precoz. De acuerdo a este endocrinólogo, los problemas asociados con la estatura no son la única consecuencia hormonal que puede relacionarse con la pandemia. “En los últimos meses también notamos un aumento en las consultas por desarrollo sexual precoz. Las hipótesis posibles que ligan ambos fenómenos se basan en que durante el aislamiento los chicos realizaron menos actividad física y tuvieron mayor ingesta de alimentos. Eso puede haber causado más sobrepeso, situación que puede relacionarse con el adelantamiento de la pubertad. De todos modos, es un tema que debemos seguir porque también se ha registrado un aumento de consultas sobre maduración sexual precoz en chicas delgadas”, explicó el profesional, que es secretario de la Fundación de Endocrinología Infantil. Y agregó: “Son casos que pueden requerir algún tratamiento. Por ejemplo, estamos viendo casos de maduración sexual en niñas de 7 u 8 años cuando usualmente la edad promedio de inicio de la pubertad es entre los 10 y los 11 años”.
¿Por qué es clave volver a llevar a los chicos a la consulta pediátrica presencial? “Los controles periódicos permiten generar alertas tempranas para muchas patologías. Y el diagnóstico precoz en temas de crecimiento y maduración es la clave para facilitar la recuperación y el éxito de cualquier tratamiento”, concluyó Bergadá.
Salud en el celular
En los últimos años aparecieron muchas apps para smartphones especializadas en prevención. “Lo que vemos como positivo es que usándolas el paciente se involucra más en el control de su salud”, explicó Bergadá. Respecto a las patologías del crecimiento, un laboratorio médico financió el desarrollo de una app gratuita que facilita a los padres el seguimiento de la evolución de la altura y peso de sus hijos desde bebés hasta los 19 años. Según le explicó a PERFIL Gerson Manzella, gerente de Marketing del Laboratorio Sandoz: “La aplicación se llama Jirafa y se puede usar en celulares Android y iOS. Y explica en forma fácil cómo registrar en el hogar el peso y la altura. Con eso, la app facilita la comparación y el control con las curvas de crecimiento “saludable” emitidas por la OMS y la Sociedad Argentina de Pediatría para cada edad y sexo”. Estas apps de seguimiento de salud se están popularizando y facilitan los controles periódicos porque generan en forma automática alertas específicas sobre varios temas, incluyendo recordatorios y alertas del calendario de vacunación.