Diluvio desde la madrugada, y caravanas en moto, en micro, en auto; otras llegadas en avión: el agua no logró apagar el fuego de las miles de mujeres que, desde la mañana de ayer, coparon las calles, las aulas y las casas de La Plata para vivir el 34º Encuentro Nacional de Mujeres (ENM), que –a pesar del clima adverso– sigue postulando para convertirse en el más multitudinario de su historia. Las organizadoras aseguraron que, tras los tres días, habrán pasado por aquí unas 200 mil mujeres.
Luego de que los bomberos decidieran cancelar el acto inaugural, que iba a ser en el Estadio Unico de La Plata, por “las condiciones climáticas”, se realizó una marcha, convocada por la Campaña Somos Plurinacional, que impulsa el cambio de nombre del Encuentro por uno que incluya a las disidencias y a las naciones originarias). Desde este espacio se busca que la identidad del tradicional evento pase a ser Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales y No Binaries.
Esta convocatoria anual –que se inició en 1986 con solo mil asistentes y no para de crecer año tras año, sobre todo después de Ni Una Menos– tiene un cronograma que consta de dos días de talleres, activividades culturales, ferias, conversatorios y la tradicional marcha que será hoy a partir de las 18.30. Y mañana será el acto de cierre, en el que se decidirá la próxima sede.
Bajo techo. Los 87 talleres, que comenzaron ayer, son una de las actividades fundamentales de las jornadas, ya que en estos espacios se plantean ejes temáticos a tratar para luego poner en la agenda pública.
Las reuniones fueron en las aulas de las facultades de la Universidad Nacional de La Plata y en las escuelas preuniversitarias. Son espacios muy amenos, en ronda, y se habla de manera horizontal. Cada asistente pide la palabra, comparte experiencias personales o su mirada desde su militancia social, según la temática que se trate.
La ciudad de La Plata se prepara para el 34° Encuentro Nacional de Mujeres
PERFIL realizó una recorrida respetuosa por los talleres, ya que no se puede reproducir lo que se habla en esos espacios de ámbito privado porque se trata de cuestiones muy personales y en la mayoría se notó la preocupación de las mujeres porque estos temas no se encuentran en la agenda mediática ni pública.
Los ejes temáticos de los talleres van desde Mujer y Estrategias para el acceso al aborto legal, seguro y gratuito; Protocolos para la prevención y erradicación de la violencia de género en instituciones y organizaciones, Lenguaje inclusivo, No binaries. También sobre violencia obstétrica, maternidad, mujeres en el sistema carcelario, estrategias para que las causas de abuso sexual no prescriban, entre otras.
Las salas tienen un piso mínimo de cien participantes y también se expresó la necesidad de que debe haber más información sobre la mujer y su propio cuerpo. Eso se notó en muchos talleres que hablaron desde abusos sexuales, la primera infancia, hasta en los de maternidad y violencia obstétrica, por poner algunos ejemplos.
“Como mujeres, es fundamental que nos informemos de lo que es nuestro cuerpo”, dice una de las más de 150 asistentes del taller de maternidad. “No puede ser que me enteré cuestiones fundamentales recién cuando estuve embarazada”.
También se planteó la preocupación de que en las formaciones profesionales, desde médicas hasta abogadas, no se tratan temas relacionados con cómo tratar con víctimas de violencia: la falta de un acompañamiento judicial con mirada de género y tiempos acordes, por ejemplo, en lo referido a la lucha por la no prescripción de causas relacionadas con abusos sexuales. Al igual que la generación de leyes acordes y protocolos, sobre todo la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI).
Otra de las cuestiones que se repitieron en distintas charlas fue el tema del peligro al cual se exponen las mujeres cada vez que realizan alguna denuncia de acoso. “Las mujeres somos las que solemos quedar expuestas. Corremos el riesgo de que nos amenacen o que nos van a difamar”, aseguran en las aulas.
También tuvieron mucha concurrencia charlas de Antiespecismo, Cuerpes menstruantes, Mujeres y deconstrucción de cuerpos feminizados o Infancias e infancias trans y no binarias sin violencias ni discriminación, entre otras.
Todo sigue hoy con charlas y la multitudinaria marcha, que arrancará a las 18.30 desde la calle 1 y 60 –donde desapareció Johana Ramallo, víctima de trata y femicidio– y recorrerá las diagonales de la capital de la Provincia hasta llegar al Playón del Estadio Unico, donde se llevará a cabo una peña.
Espacio para tejer y ampliar redes
En La Plata la lluvia no se detiene, pero nosotras tampoco. Somos miles de mujeres, lesbianas, travestis, trans, no binaries, que estamos llegando desde todas las provincias para participar del 34° Encuentro, que será, además de plurinacional, probablemente el más multitudinario de la historia encuentrera que los feminismos venimos escribiendo en Argentina.
Cada año las jornadas permiten profundizar el trabajo que se realiza desde distintos sectores y son una oportunidad única de federalizar las discusiones. Durante tres días hablamos, debatimos y escuchamos, enriqueciéndonos de la interseccionalidad que se materializa en las cuerpas y en las experiencias que se intercambian en los talleres y todas las actividades que tienen lugar.
Esta edición da cuenta de que los feminismos son un actor político clave. Una vez más América Latina está pendiente de Argentina, desde donde los reclamos por la soberanía sobre nuestros cuerpos y el derecho de vivir vidas libres de violencias en los últimos años cruzó fronteras con mayor ímpetu y se hizo eco en todo el continente.
Este Encuentro ocurre en un año electoral. La histórica marcha estará finalizando cuando los candidatos a presidente estén en el primer debate, y deban contar sus propuestas de políticas públicas para abordar los temas que para ese momento circularon como consigna, canción, reclamo, en las calles platenses. Y la Ley de Paridad permitió sumar mujeres en las listas, pero sin embargo todavía no se tradujo necesariamente en más feministas en puestos de decisión. Y la agenda feminista continúa teniendo un lugar secundario entre las propuestas electorales, a pesar de su amplitud, que se manifiesta al observar el temario del centenar de talleres, donde la palabra circula horizontalmente, donde los intercambios permiten tejer y ampliar redes y sobre todo probarle a cada una, a cada une, que no está solx y que nos tenemos.
Hay una frase que siempre se escucha que afirma que nadie vuelve igual después de asistir a un Encuentro. Volvemos cambiadas y fortalecidas. Con más ganas y fuerza para seguir trabajando en construir la sociedad, el país, el mundo feminista que queremos para todas, todos, todes.
Paula Rey, Responsable de Comunicación de ELA.
