Carlos Gustavo Pampillón está sindicado como el fundador y líder ideológico de una agrupación neonazi de Mar del Plata, conocida por la policía como "Los Pampillones".
Un informe realizado por la ONG La Alameda lo vinculó con varios ataques ocurridos en esa ciudad en los últimos años, tras elaborar un informe sobre bandas fascistas.
En una entrevista telefónica con Perfil.com, Pampillón negó pertenecer a ninguna agrupación neonazi y alegó que todas las denuncias en su contra son un “cúmulo de falacias”.
“Niego rotundamente ser nazi. Todo eso es una fantasía que han hecho en Mar del Plata los que son antagónicos a mí", sostuvo el acusado.
Sobre su ideología, Pampillón explicó a este portal: "Yo soy de derecha nacionalista, o sea me odian porque en este país ser de derecha y nacional es ser facho y nazi. Te puede parecer asqueroso, pero no es nazismo”.
Pampillón es católico, está recién divorciado tras 19 años de matrimonio y se autodefine como una “Lilita Carrió del nacionalismo”. Practica jiu jitsu y afirma que su única luz es Dios. Además, es integrante del Fonapa (Foro Patriótico Nacional).
Sobre esa agrupación, el acusado detalló: “Hay doctores, contadores, abogados, laburantes, obreros, radicales, siempre con una tendencia nacionalista". "Somos pro fuerzas armadas, pro orden y no solamente nacos (nacionalista católico). A mí me pegan todos porque no me encasillo en ninguno”, afirmó a Perfil.com.
“Yo soy nacionalista pero todo lo demás que dicen que hice es mentira, jamás le pegué a nadie por el color de piel, la religión o condición sexual, ni mandé a pegar a nadie. Me parece una bajeza, un delirio, una locura”, argumentó.
Y agregó: “Yo no soy un extremista por eso cuando me ponen en un extremo me recaliento. Lo que sí que tengo es que soy cabrón, soy temperamental, otra cosa es ser violento. Soy apasionado para defender las ideas. Yo jamás me negué a hablar, se cierran del otro lado”.
A Pampillón lo acusan de ser el líder ideológico de esas bandas, entre otras cuestiones, porque su yerno, Alan Olea, es líder de la organización fascista marplatense Bandera Negra. En el informe de La Alameda se especifica que los miembros de esa agrupación están involucrados en delitos de odio y actos violentos, y que intentan reclutar menores en las puertas de las escuelas.
El supuesto líder negó su relación con Olea, y dijo tener problemas con su hija de 16 años, precisamente por la relación que ésta mantiene con el líder de Bandera Negra: “Yo estoy distanciado de ella por distintas cuestiones, justamente porque no estoy de acuerdo con el novio que tiene", contó a este portal.
"Hace cuatro años que [Alan Olea] hizo actos conmigo, pero lo denuncié penalmente y civilmente por abuso de menores porque estaba con mi hija con 15 años”, narró.
No obstante, criticó la decisión de la ONG de publicar el nombre de la adolescente en su informe, al tratarse de una menor de edad: “En el informe la nombran y es menor de edad. Hablan de ella y de una amiga suya que también lo es. Eso es ilegal, en los medios cuando un acusado es menor no lo nombran”, denunció.
Sobre el ataque al joven homosexual que pertenece a la organización “Acción Antifascista”, Lucas Alan Baima, por el que fue denunciado, Pampillón relató: “Yo no tengo nada que ver, esta denuncia de Lucas es una denuncia falsa porque en realidad ellos agredieron a mi hija y a otra chica.
"Cuando los denunciados se enteraron, fueron a pegarlos. Yo me enteré cuando estaba todo hecho y ella [la hija] estaba en la clínica”, se defendió en diálogo con Perfil.com.
Sobre esa golpiza, responsabilizó a otro de los denunciados, Alexender Levchenco, alias el 'Rusito', con el que afirma que no tiene contacto: “Yo al 'Rusito' lo vi dos veces en mi vida, una vez que lo llevaron a un acto y un cacerolazo. Viene de Ucrania, no tiene valor en la vida, el pibe está perdido, toma unas pastillas, chupa y hace cagada, ¿cómo voy a abalar eso? Ha tenido problemas sexuales con él denunciante, que lo arreglen entre ellos”, aseveró.
Consultado sobre las razones de las numerosas denuncias en su contra, el acusado argumentó: “Me denuncian porque es la manera de focalizar en una organización nazi y pegarle al intendente porque hay fotos mías con el asesor del intendente o declaraciones mías apoyando a (Carlos) Arroyo, es el ABC del desprestigio. Y también porque no tengo precio. Mis convicciones no las vendo y eso no se perdona”. Y agregó: “Buscan que el Fonapa esté vinculado con todo y que yo soy el lider, están haciendo una caza de brujas”.
Pampillón se responsabilizó de los actos por los que está procesado en la Justicia, al reconocer haber atentado contra el monumento que señaliza a la base naval marplatense como centro clandestino de detención. Además, admitió haber realizado realizar pintadas en el Centro de Residentes de Bolivia en Mar del Plata.
Sobre este último acto vandálico, recordó: “Yo puse 'Fuera Bolivia de Salta' nunca bolivianos, es una frase nacionalista pero no hay xenofobia. Debo ser el único que procesan porque pinte un paredón pero la Justicia descartó la idea de racismo. Hay un hecho que es real que es que se robaron parte de nuestro territorio y actúo en base a ese acto. Si hubiera embajada de Bolivia en Mar del Plata hubiera ido ahí”.
“Yo quiero que deporten a todos los extranjeros que delinquen, el que venga a laburar bienvenido sea, el que venga a delinquir que vuelva a su país, lo reivindico”, concluyó.
(*) De la redacción de Perfil.com.
