El llamativo episodio ocurrió entre principios de junio y fines de julio en Uruguay. Más de una decena de personas ingresaron a la estancia de August von Fink junior, lograron abrir la caja fuerte donde estaba una porción de su patrimonio y huyeron con un millonario botín conformado por 17 lingotes de oro.
La información fue revelada recién ahora, con la investigación avanzada, por el diario El País. De acuerdo a la crónica, el llamativo robo ocurrió se hizo en dos partes: la primera de ellas el 6 de junio pasado; mientras que la segunda, cuando escaparon con el material, fue el 26 de julio, unos veinte días después.
En la primera ocasión, los asaltantes lograron ingresar a la estancia ubicada en la zona litoral del vecino país. La investigación sospecha de que un contacto les habría pasado la información respecto de cómo eran los lugares de la casona y en qué parte estaba la caja fuerte de interés para los delincuentes.
Por ello, una vez adentro, los asaltantes se dirigieron hacia la zona subterránea a la habitación principal, donde el magnate multimillonario alemán conservaba parte de su fortuna junto con documentos de importancia sobre negocios y familia. Cada uno cargaba herramientas e instrumentos necesarios para lograr abrir la bóveda y escapar.
“En su primer ingreso a la estancia, los integrantes de la organización solo pudieron sacar la traba de hierro de la caja fuerte y cortar su primera capa de hierro que quedó tirada en el piso”, señaló la fiscal de Carmelo, Eugenia Rodríguez, que lleva a cargo la investigación por el robo.
El segundo ingreso a la estancia
Cuando ingresaron por primera vez, los autores materiales del robo permanecieron sólo unos pocos minutos en el lugar y escaparon, incluso dejando allí los instrumentos que habían utilizado como discos de corte o tubos de oxígeno. Todo quedó en el lugar durante varias semanas.
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Pero una veintena de días después los asaltantes volvieron al lugar. Fue el 26 de julio pasado cuando lograron ingresar a la bóveda nuevamente y terminar de acceder a lo que había dentro. Ahí se encontraron con una importante cantidad de lingotes de oro de los que lograron hacerse: 17 en total, junto con mil krugerrands, una conocida moneda de oro sudafricana.
El botín con lingotes y monedas está valuado en 2,5 millones de dólares y habían sido retirados de un banco alemán. Fueron cuatro meses de exhaustiva investigación hasta que las autoridades desmantelaron la banda.
Aumentó de robo de canillas, cables y picaportes
El golpe comando fue perpetrado por 11 personas que fueron detenidas durante una operación llamada “Anónymus” y luego condenados por la Justicia uruguaya. Respecto del millonario botín del robo, a dos meses de haber sido consumado no hay novedades.
Quién es August von Fink junior, el magnate asaltado
El asalto de película tiene como víctima a August von Finck junior, un banquero alemán de 91 años que heredó la fortuna de su padre. A su vez, también se quedó con el emporio asegurador Allianz, con presencia en la Argentina, y el banco Finck.
De un marcado perfil bajo, el empresario alemán nunca había estado demasiado interesado en los negocios de su padre y de su familia. Por el contrario, el hombre prefería la ciencia, las bellas artes, la botánica y la hostelería.
Sin embargo, tras la muerte de su padre, homónimo, Von Fink junior se tuvo que hacer cargo de las empresas y los manejos para evitar que se caiga. Fue así que logró llevarlas y seguir con el incremento de su fortuna: es uno de los millonarios más ricos con 8.700 millones de dólares según la revista Forbes.
AS/FL