Cada tercer domingo de junio, miles de familias argentinas celebran el Día del Padre. La tradición incluye almuerzos familiares, regalos, saludos y homenajes. Sin embargo, pocos conocen que originalmente se pensó otra fecha para esta celebración: el 24 de agosto, en conmemoración al nacimiento de Merceditas, la hija de José de San Martín.
Día del Padre 2025: cuánto cuesta el regalo, qué se elige y cómo ahorran los papás
La propuesta de celebrar el Día del Padre el 24 de agosto fue impulsada en 1958 por el Consejo Nacional de Educación, a instancias de la docente mendocina Lilia Martelotte de Chierico. La fecha buscaba rendir homenaje al rol paternal de San Martín y subrayar su figura como ejemplo moral para las futuras generaciones. En Mendoza, incluso, aún se recuerda esta fecha en algunos actos escolares.
No obstante, con el tiempo la propuesta perdió fuerza frente al modelo anglosajón. Argentina, al igual que muchos países de América, adoptó la celebración internacional instaurada en Estados Unidos: el tercer domingo de junio.
El origen moderno del Día del Padre se remonta a 1909 en Spokane, Washington, cuando Sonora Smart Dodd propuso crear una jornada especial para homenajear a su padre, un veterano de guerra que había criado solo a sus seis hijos. La fecha elegida fue el mes de junio, coincidiendo con el cumpleaños de su progenitor.
La iniciativa fue ganando reconocimiento, hasta que en 1966 el presidente Lyndon B. Johnson la proclamó oficialmente. La fuerza del calendario escolar y la creciente comercialización ayudaron a expandir la fecha a otros países, incluida Argentina.
Día del Padre: la expectativa de mejorar las ventas de 2024
En el país, el tercer domingo de junio fue impuesto gradualmente mediante resoluciones ministeriales y se afianzó gracias a las actividades escolares. Las provincias acompañaron la unificación del calendario, dejando atrás el enfoque patriótico original.
Actualmente, aunque persiste el recuerdo de San Martín como figura fundacional, el Día del Padre se vincula más a lo afectivo, familiar y comercial que a una conmemoración histórica. Así, la paternidad se celebra de manera más global, alineada con la tradición internacional.