El Gobierno ratificó este jueves por la noche que vetará el proyecto aprobado por el Senado que aumenta las jubilaciones en un 8,1 por ciento, calificando la iniciativa que logró más de dos tercios de los votos de "irresponsable, ilegal e inconstitucional".
"El proyecto aprobado hoy por el Congreso tiene como único objetivo destruir el programa económico del Gobierno", señaló un comunicado de la cuenta Oficina del Presidente cerca de la medianoche, indicando que "el Presidente se comprometió con los argentinos a sostener el superávit fiscal a toda costa y así lo hará".
El veto tendrá un inevitable costo político para el Gobierno, pero la nota oficial indicó que "se trata de un proyecto de ley irresponsable, ilegal e inconstitucional que establece gastos exorbitantes sin su correspondiente partida presupuestaria, lo que implicaría que el Gobierno vuelva a caer en las viejas prácticas de emisión monetaria, el aumento de impuestos o el endeudamiento, que son las mismas recetas que nos han llevado al fracaso durante los últimos 100 años".
"Esta ley implica un gasto adicional del 1,2% del PBI, o lo que es lo mismo, 25% del PBI en términos dinámicos, obligando al Estado a contraer deuda que deberán pagar en el futuro los jóvenes argentinos que, gracias a medida como estas, hoy son mayoritariamente pobres", concluyó el comunicado libertario.
Caputo: "El equilibrio fiscal es innegociable"
Durante la jornada, el ministro de Economía, Luis Caputo, había señalando que sostuvo que "el equilibrio fiscal es innegociable", después de que el Senado sancionara proyecto.
En la misma línea se había expresado el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien también había advertido, minutos después de que se sancionara la ley, que "el equilibrio fiscal es absolutamente innegociable".
Más temprano, en su habitual conferencia de prensa, el funcionario había dicho que "todo lo que vaya en contra del equilibrio fiscal y de las cuentas públicas, que es nuestra columna vertebral, se va a vetar".
El ex socio de Milei explica por qué no funciona el plan económico del Gobierno
Adorni hizo referencia de esa forma a la atribución del Poder Ejecutivo de vetar la ley de forma total o parcial, tras su aprobación en el Congreso.
El Senado aprobó por dos tercios el proyecto que aumenta las jubilaciones en un 8,1 por ciento y pliega su actualización mensual al Índice de Precios al Consumir (IPC), una iniciativa que ya había tenido la media sanción de la Cámara de Diputados y sobre la que presidente Javier Milei había advertido que, de sancionarse, la vetaría.
Fue por 61 votos afirmativos, ocho negativos y cero abstenciones, en general; y en particular, la oposición logró blindar todos los artículos sensibles para el Gobierno nacional con dos tercios.
Además del aumento de 8,1 y el cambio en la fórmula de actualización, la iniciativa contempla que, en marzo de cada año, se aplicará un aumento del 50 por ciento de la variación de la de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) por sobre la variación del IPC del año anterior.
A su vez, dispone que la ANSES "garantizará, para el caso de las personas que perciban un solo beneficio, el pago de una prestación con un suplemento dinerario de carácter alimentario, de forma tal que los ingresos totales no sean menores al último valor de la canasta básica total por adulto multiplicado por 1,09".
También instruye a ese organismo a que cancele la totalidad de las deudas que mantiene con las provincias cuyos sistemas previsionales "no fueron transferidos al Estado nacional, como así también con los beneficiarios que cuenten con sentencia firme, dentro de los 6 meses de la promulgación de esta ley".
Su aplicación significará un gasto del 0,43 por ciento, según especificó un estudio realizado por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
Ante este panorama, Milei aseguró que utilizaría, por primera vez, su facultad de veto, al calificar como "degenerados fiscales" a los diputados cuando le dieron luz verde al proyecto.
En el caso del veto parcial, el presidente Javier Milei puede proceder a la promulgación de determinados artículos y al rechazo parcial de otros, siempre y cuando no modifique el espíritu del proyecto sancionado por el Congreso.
En caso de que se apele al veto total, el proyecto regresa al Poder Legislativo que, de tener intenciones, puede insistir en la sanción de la ley.
Para eso último es necesario que ambas cámaras cuenten con dos tercios de los votos para imponer su intencionalidad inicial; de esta forma la ley se promulgaría a pesar de la voluntad del mandatario.
De no conseguirse el número en alguna de las dos cámaras, el veto se mantiene y el proyecto no puede volver a tratarse en las sesiones de ese año.
Según supo dijo la Noticias Argentinas citando fuentes del gobierno, la decisión que se baraja por estas horas en la Casa Rosada es avanzar con el "veto parcial".
En el caso del veto parcial, el presidente Javier Milei puede proceder a la promulgación de determinados artículos y al rechazo parcial de otros, siempre y cuando no modifique el espíritu del proyecto sancionado por el Congreso.
"Casta, vení a tocarme el equilibrio fiscal": Milei recibió el respaldo de quienes lo acompañaron en Olivos
Varios funcionarios e integrantes del equipo económico acompañaron al Presidente en Olivos en los momentos previos al anuncio del veto a la nueva fórmula jubilatoria. Y se expresaron en respaldo de la decisión del Gobierno. Los mensajes, ilustrados con la foto grupal junto al Milei, fueron reposteados por el Jefe de Estado.
"Casta, vení a tocarme el superávit fiscal", fue el desafiante texto que publicó José Luis Espert. "Lo último que ve la casta antes de tocar el equilibrio fiscal. El equilibrio fiscal es innegociable!", escribió el secretario de Finanzas Pablo Quirno.
Federico Sturzenegger estuvo más suave. "Preparando la defensa del superávit fiscal", tuiteó el ministro de Desregulación y Transformación del Estado. Se sumó Demian Reidel, jefe del Consejo de Asesores presidencial: "Cuando la casta trata de romper el equilibrio fiscal, acá lo defendemos. #karaduras".
LT
ds/HB