El examen práctico para obtener la licencia de conducir en la Ciudad de Buenos Aires se renovará a partir de este jueves con un mayor nivel de complejidad y nueva tecnología. Ya la parte teórica había tenido cambios a partir del 1° de julio, sumando diferentes temáticas en el contenido, ubicando al aspirante a conductor en distintas situaciones de contexto en calle.
Pero el que desde este jueves 29 de agosto será actualizado es el examen práctico, más estricta con la incorporación de nuevas postas de desempeño y tecnología, lo que le dará mayor transparencia y objetividad al proceso. En esa prueba, se anticipa, los aspirantes deben superar distintos niveles de destreza para aprobarlo.
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La prueba anterior constaba de cuatro instancias, mientras que el nuevo práctico incorporará otras dos postas que elevarán la exigencia del examen (pueden ser evaluadas por un único instructor en el asiento de acompañante o 6 distintos, repartidos en cada posta).
Hasta ahora se evaluaba el estacionamiento, el cambio de marcha y cruce de vía, la marcha atrás y el zig zag en conos, mientras que desde este jueves se incorporarán, además, ver cómo se comporta el conductor cuando tiene que maniobrar con el embrague de su vehículo en subida, y también el control que tiene sobre el auto en bajadas, y en entradas y salidas de rotondas. En cuanto a las nuevas tecnologías, se colocarán dos cámaras en el interior y el exterior del vehículo del aspirante para evaluar su desempeño, y cada instructor, situado en las distintas postas, contará con una tablet en la que volcará la eventual quita de puntos por fallas en la conducción.
Con cuatro puntos menos, por falla en la distancia de estacionamiento, golpear una valla u otras dificultades, el aspirante quedará inmediatamente reprobado.
El tema del embrague en subida, una maniobra imprescindible en muchísimos estacionamientos de Capital Federal que tienen varios pisos, le agregará un sensible nivel de dificultad a los conductores nóveles, porque la maniobra implica una destreza de manejo y de conocimiento del vehiculo profunda, sobre todo en aquellos estacionamientos en los que los andariveles de ascenso son estrechos o muy pronunciados.
En la Ciudad de Buenos Aires se emiten alrededor de 450 mil licencias por año (87,7% son renovaciones y 12,3% otorgamientos). El secretario de Transporte de la Ciudad, Juan José Méndez, le dijo a la agencia Noticias Argentinas que "el otorgamiento de la licencia de conducir es una de las instancias más importantes en la formación vial de una persona".
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"En esta oportunidad implementamos más exigencias en la parte práctica para que el aspirante no sólo demuestre que está en condiciones de manejar, sino que además cuenta con los conocimientos y la capacidad de respuesta necesarios para convivir responsablemente con peatones, ciclistas y otros conductores de vehículos que se mueven por la Ciudad", añadió el funcionario.
NA/H.B.
