La medicina prepaga aumentará un 3,5 por ciento desde marzo, según indicó hoy la resolución Resolución 531/2021, publicada en el Boletín Oficial y firmada por el Ministro de Salud, Ginés González García. De ese modo, el ajuste en las cuotas autorizado por el Ejecutivo es inferior al 7 por ciento que se iba a aplicar en diciembre, y cuya publicación entonces en el Boletín Oficial derivó en un cortocircuito, ya que el presidente Alberto Fernández ordenó anular la suba y se publicó un nuevo decreto dejando sin efecto el anterior 24 horas después. El sector había reclamado un aumento en la cuota de las prepagas para "compensar la inflación" y había advertido que la medicina privada afrontaba una "crisis de financiamiento".
"Autorízase a todas las Entidades de Medicina Prepaga inscriptas en el Registro Nacional de Entidades de Medicina Prepaga (RNEMP) un aumento general, complementario y acumulativo de aquel que ha sido aprobado para el mes de diciembre de 2020 mediante la Resolución Nº 1787/20 del Ministerio de Salud, de hasta un tres y medio por ciento (3,5%) a partir del 1º de marzo de 2021", señaló el artículo primero de la resolución.
Con el aumento del 3,5%, la suba pautada se encuentra más cercana a la posición del gobierno. Respecto al edicto, se subrayó que "las entidades deberán, una vez autorizado dicho aumento, informar a los usuarios los incrementos que se registrarán en el monto de las cuotas con una antelación no inferior a los treinta (30) días corridos, contados a partir de la fecha en que la nueva cuota comenzará a regir".
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En otro punto, la resolución consideró los reclamos esgrimidos por los prestadores y consideró que "al observar la variación que sufrieron los costos en salud, resulta necesario contemplar que los mayores costos del sector y la valiosa y necesaria inversión que han debido realizar los prestadores para hacer frente a la pandemia y evitar el colapso del sistema sanitario". Por otro lado, se aclara que el aumento deberá ser retributivo en los servicios médico-asistenciales que los prestadores brinden a sus usuarios.
En diciembre, se había autorizado un incremento del 7 por ciento a partir de febrero, pero 24 horas después el presidente Alberto Fernández había ordenado derogar la habilitación al aumento en las cuotas. La decisión tomó por sorpresa a los prestadores, que en el momento realizaron consultas informales y luego mantuvieron reuniones con el jefe de Estado. En ese escenario, este sábado se oficializó la entrada en vigencia de una nueva suba. Eso obligó a seguir negociando los aumentos pedidos por el sector y la morigeración que pedía el gobierno nacional amparado en la situación sanitaria y económica.
El tanto, el diálogo entre los representantes de salud y el gobierno se mantuvo durante todo el primer mes del año. El 7 de enero, los representantes de la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS), se reunieron con el Alberto Fernández y el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y expusieron la situación de emergencia que atraviesa el sector. Cuatro días después, los mismos prestadores privados mantuvieron un encuentro con el ministro y viceministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán y Nicolás Kreplak. El 14 de enero se terminó de conformar una mesa de trabajo entre el ejecutivo y la FAPS.