Mariano Cordi, el hombre acusado de asesinar a su ex novia Valeria Coppa frente a la catedral de la ciudad de San Carlos de Bariloche, continuaba internado hoy en estado reservado en la sala de terapia intensiva del hospital zonal "Ramón Carrillo", sedado e intubado, tras haber sido sometido a una delicada operación para extraerle una bala del cráneo.
El hombre fue capturado el viernes al ser descubierto en muy mal estado de salud cuando se ocultaba a unos 300 metros de la cumbre del cerro Carbón, tras varios días en los que logró mantenerse como fugitivo de la Justicia. Fue ingresado por Guardia al hospital e inicialmente se le realizó un examen médico y se trató el agudo cuadro de deshidratación que presentaba.
En una tomografía computada realizada con posterioridad, se le detectó en la cabeza la presencia de un proyectil de arma de fuego, producto de un fallido intento de suicidio realizado varias horas antes en el cerro. Los médicos decidieron realizarle una cirugía craneana descompresiva, ya que presentaba hipertensión endocraneana, producto de la inflamación generada por el disparo, además de una toilette quirúrgica y la colocación de un catéter de Pic, con el objetivo de medir la presión craneana.
Citado por Noticias Argentinas, el director del hospital, Leonardo Gil, precisó que a Cordi le practicaron una craneotomía por la cual se "le extrajo una porción de cráneo para descomprimir el cerebro que presentaba una importante inflamación y hematoma". Tras la operación, el paciente permanecía "en terapia intensiva con asistencia respiratoria, está estable pero como todo paciente en estas condiciones, su cuadro es grave".
Cordi era buscado desde el martes pasado acusado de matar de un disparo en la cabeza a Valeria, su expareja, en un encuentro que pactó la mujer en la plaza de la Iglesia Catedral, cerca de su trabajo. Según se determinó en la investigación, el hombre estaba obsesionado con la víctima, quien había decidido terminar con una relación de unos cuatro meses. En tanto, la familia Coppa hizo público su agradecimiento a "la comunidad de San Carlos de Bariloche por tanto apoyo moral y espiritual que recibimos con motivo del triste episodio en el que nos vimos involucrados, al perder a nuestra hija Valeria y madre de nuestros nietos". N.A./D.S.