El gobierno de Irlanda multó por 225 millones de euros a la aplicación de mensajería WhatsApp, perteneciente al grupo Facebook. Fue por "incumplimientos muy graves" a los principios de transparencia con sus usuarios. La compañía señaló que se trata de “sanciones desproporcionadas”.
La Comisión de Protección de Datos (DPC) de ese país estuvo a cargo de la investigación contra WhatsApp, por el uso de informaciones personales. En sus resultados señaló "incumplimientos muy graves" de la transparencia y una "falta de información muy significativa" proporcionada al usuario por la firma.
Además de la sanción económica, por 225 millones de euros, dispuesta contra la empresa del grupo Facebook, se le comunicó que debe cumplir con la normativa de protección de datos de la Unión Europea (UE).
Dicha multa es la mayor impuesta por la DPC irlandesa, según la agencia de noticias Télam. Y la segunda más grande de un regulador digital en Europa, después de la multa de 746 millones de euros impuesta contra Amazon, el pasado julio en Luxemburgo, por incumplir las normas sobre la información privada de los usuarios. Sin embargo, algunas ONGs acusan al organismo de ser complaciente debido a que Irlanda se beneficia de los ingresos fiscales de estas compañías.
Ante las acusaciones y sanciones económicas en su contra, WhatsApp respondió: "No estamos de acuerdo con la decisión sobre la transparencia que proporcionamos a las personas en 2018 y las sanciones son totalmente desproporcionadas". Y añadió que se trata de “sanciones desproporcionadas”.
La investigación contra la mensajería
La Comisión de Protección de Datos investigó si la aplicación WhatsApp "cumplía con sus obligaciones de transparencia" en lo que respecta a informar a los usuarios de cómo se utilizarían sus datos. Esto incluía mostrar cómo la aplicación de mensajería comparte los datos con el resto de las empresas de Facebook.
El incumplimiento del principio de transparencia puede socavar otros principios fundamentales de la protección de datos", incluidos "los principios de equidad y responsabilidad", señaló el ente regulador.
El Reglamento General de Protección de Datos de la UE, en vigor desde 2018, otorga mayores poderes a los reguladores para proteger a los consumidores frente a los gigantes digitales como Facebook, Google, Apple y Twitter, que, atraídos por un tratamiento fiscal favorable, eligieron Irlanda como sede. El RGPD permite a los reguladores multar a estos grupos hasta el 4% de su facturación global.
MF CP
