Nuevo informe

Tras un año irregular, la construcción encara 2026 con expectativas moderadas

En octubre la actividad retrocedió 0,5% mensual sin estacionalidad, aunque exhibió una mejora interanual del 8%.

Construcción. El nivel del sector está 46% abajo del promedio de 2023. Foto: NA

El sector de la construcción volvió a mostrar señales de debilidad hacia el final del año y permanece muy por debajo de los niveles previos a la llegada de Milei al poder. Un informe de la consultora Empiria 481 recopiló datos que a priori son preocupantes y dejan dudas respecto al futuro.

En octubre la actividad retrocedió 0,5% mensual sin estacionalidad, aunque exhibió una mejora interanual del 8%. Pese a ese rebote puntual, el balance anual sigue siendo insuficiente: en el acumulado de 2025 la construcción creció 7,9%, pero aún se mantiene 20,7% por debajo de los registros de noviembre de 2023.

El costo de la construcción en CABA aumentó 2% en noviembre

Las perspectivas para noviembre no mejoraron el panorama. Los indicadores adelantados anticipan una nueva contracción, con caídas del 7,1% en el índice Construya y del 7,7% en los despachos de cemento. La recuperación continúa siendo dispar: mientras la demanda de insumos vinculados a la obra pública creció 16% interanual, los materiales asociados a la construcción privada muestran un marcado estancamiento. El asfalto, principal insumo de la obra pública, es el único componente del ISAC que se ubica por encima de los niveles de fines de 2023, aunque todavía lejos de sus máximos históricos.

El freno de la actividad también se refleja en el empleo. En septiembre se contabilizaron 389.430 trabajadores registrados en la construcción, un 3% más que un año atrás. Sin embargo, entre noviembre de 2023 y septiembre de 2025 se perdieron unos 64.000 puestos asalariados en el sector, cifra que explica cerca de la mitad del total de empleos destruidos en la economía en ese período. A esto se suma una fuerte reducción en la cantidad de firmas: en los últimos dos años desaparecieron unas 2.100 empresas constructoras, el 10% del total, con el mayor ajuste concentrado entre 2023 y 2024.

Perspectivas 2026: recuperación muy modesta

De cara a 2026, Empiria proyecta una mejora muy moderada. Con costos elevados pero más estables —e incluso con la posibilidad de una leve baja—, financiamiento todavía incipiente y precios de venta que no terminan de convalidar el nuevo escenario macroeconómico, la consultora prevé que la construcción continúe atravesando una fase de estancamiento.

No obstante, el repunte de las operaciones inmobiliarias comenzó a mejorar el ánimo empresarial. La brecha entre expectativas optimistas y pesimistas se sigue achicando: en noviembre, las perspectivas positivas crecieron del 9,7% al 10,5%, mientras que el porcentaje de empresarios que anticipan un empeoramiento cayó al 21%, con una reducción de 2,3 puntos porcentuales.

Las principales oportunidades de mejora, según el informe, podrían venir de una mayor utilización de insumos importados —aunque con impacto negativo sobre la industria local—, de nuevas fuentes de financiamiento a través del mercado de capitales y del sistema bancario, y de un relanzamiento del crédito hipotecario, que podría comenzar a consolidarse a partir del segundo trimestre del año.

Desde la consultora argumentan que, en el plano inmobiliario, la eventual liberación de dólares depositados en bancos tras el blanqueo fiscal podría aportar una inyección relevante de capital para la intermediación y el desarrollo, aunque el Gobierno ya moderó las expectativas respecto de estimaciones que hablaban de hasta USD 20.000 millones. El informe también señala la necesidad de reformas estructurales dentro del sector, especialmente en la organización societaria de las empresas, un factor que hoy limita el acceso al crédito bancario en condiciones competitivas. Actualmente, el 30% de las firmas del rubro son unipersonales, proporción que asciende al 22% en el caso específico de las constructoras.

Crédito hipotecario: fuerte suba en octubre y abrupta caída en noviembre

El crédito hipotecario mostró un comportamiento errático en el último tramo del año. Tras un fuerte repunte en octubre, con desembolsos por USD 370 millones —un 50% más que el promedio de agosto y septiembre y casi el doble que en los primeros meses del año—, en noviembre el volumen se redujo a la mitad, con apenas USD 183 millones, el peor registro de 2025.

Las altas tasas de interés, el agotamiento del stock de solicitudes, el corrimiento de varios bancos y la normalización posterior a las elecciones explican la pausa de un mercado que espera que la mejora macroeconómica se traduzca en un abaratamiento del crédito y en una mayor capacidad de fondeo.

En paralelo, las escrituras continuaron en niveles elevados. En la Ciudad de Buenos Aires se registraron 7.018 escrituras en octubre, un récord histórico, con un crecimiento interanual del 17,2% (21% si se consideran solo las operaciones con hipoteca). En lo que va del año se concretaron 56.565 escrituras, un 37% más que en 2024 y un 77% por encima del mismo período de 2023. Con respecto a septiembre, cae 1,9% ajustado por estacionalidad.

En la provincia de Buenos Aires, en tanto, se contabilizaron 15.321 escrituras en octubre, con un avance del 36% interanual y un aumento del 3,4% respecto de septiembre, mientras que el acumulado anual trepó un 40% frente a 2024 y un 60% en comparación con 2023.

Costos de la construcción en noviembre

La Cámara Argentina de la Construcción puso a disposición en los últimos meses el Indicador CAMARCO, una herramienta que estima mensualmente la variación de costos de la construcción de un edificio tipo en la Ciudad de Buenos Aires, brindando información clave para los distintos actores del sector.

El Indicador CAMARCO se compone de tres series:

Indicador del Costo de la Construcción del Edificio Tipo: mide la variación mensual de los costos asociados a la construcción de un edificio torre de planta baja y 14 pisos, ubicado en la Ciudad de Buenos Aires. Es una referencia central para el análisis del comportamiento de los costos del sector.

Indicador del Costo de Materiales: refleja las fluctuaciones en el costo de los materiales necesarios para la construcción, permitiendo evaluar el impacto de los insumos en los costos globales.

Indicador del Costo de la Mano de Obra: registra las variaciones en los costos laborales involucrados en los proyectos de construcción de edificios.

De este modo, el Indicador del Costo de Construcción registró un incremento del 2.0% respecto a octubre de 2025, alcanzando los 18.534,9 puntos. El acumulado anual se ubicó en 20,7 %.

Por otro lado, el Indicador del Costo de Materiales alcanzó los 21.055,9 puntos, con una variación mensual del 1,5 % y un acumulado anual del 19,7%.

Para finalizar, el Indicador de la Mano de Obra se ubicó en 14.839,9% puntos, con un incremento mensual del 3,0% y un acumulado anual del 22,7 %.

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