Alemania planea endurecer la normativa para los inversionistas extranjeros a más tardar a fin de año, dijo el ministro de Economía del país, Peter Altmaier, lo que hará más difícil que las compañías chinas realicen adquisiciones.
"Evaluaremos las adquisiciones con mayor acuciosidad en el futuro cuando afecten a la infraestructura central", dijo Altmaier en una declaración dada a conocer el miércoles, un día después de que los negociadores de la Unión Europea acordaran normas más estrictas.
Alemania ha aumentado la presión para una acción coordinada de la UE desde que la china Midea Group Co. adquirió en 2016 al fabricante de robots Kuka AG. Eso llevó al gobierno de la canciller Angela Merkel a reconsiderar sus herramientas para proteger a las compañías de tecnología y asegurar la competitividad alemana.
El verano boreal pasado, el gobierno alemán detuvo por primera vez una oferta china al vetar la posible compra del fabricante de máquinas herramienta Leifeld Metal Spinning AG.
Los negociadores de la UE aprobaron normas para todo el bloque para evitar que las inversiones extranjeras amenacen la seguridad nacional después de 14 meses de discusiones sobre una iniciativa que se había considerado demasiado polémica durante años.
"La iniciativa de la UE es un paso importante para proteger a nuestros sectores industriales más delicados de Alemania y Europa de adquisiciones estratégicas de otros países financiadas o impulsadas por los estados", dijo Altmaier.